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Pasó el #NiUnaMenos, quedan las víctimas
Por La Retaguardia -
Wednesday, Jun. 10, 2015 at 6:53 PM
Miércoles, 10 de junio de 2015 | (Por La Retaguardia) El 3 de junio fue una jornada especial, seguramente histórica, miles de personas se concentraron en distintas plazas del país. La Retaguardia recorrió la multitudinaria convocatoria en la Plaza de los dos Congresos de la Ciudad de Buenos Aires. Escuchamos el testimonio de personas que trabajan diariamente contra la violencia de género y también con familiares y conocidos de mujeres asesinadas. Las historias de Karem Arias, Pamela Arévalos y Laura Iglesias, cuyo juicio se está realizando esta semana.
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Pamela Arévalos fue asesinada hace 20 días.
(Por La Retaguardia) El 3 de junio fue una jornada especial,
seguramente histórica, miles de personas se concentraron en distintas plazas
del país. La Retaguardia recorrió la multitudinaria convocatoria en la Plaza
de los dos Congresos de la Ciudad de Buenos Aires. Escuchamos el testimonio
de personas que trabajan diariamente contra la violencia de género y también
con familiares y conocidos de mujeres asesinadas. Las historias de Karem Arias,
Pamela Arévalos y Laura Iglesias, cuyo juicio se está realizando esta semana.
Miles de personas salieron a la calle para gritar #NiUnaMenos;
para muchas fue su primera participación en una manifestación, convirtiendo
esta convocatoria en una oportunidad única para hacer más visible una problemática
latente desde hace tiempo en la sociedad. Muchas mujeres pudieron contar sus
historias, grupos de familiares encontraron espacios para relatar lo vivido;
y todos los medios tradicionales, que habitualmente dedican su tiempo a hablar
de cualquier otro tema y/o cuentan en su staff con personajes cómplices en
la construcción de la desigualdad de género, se vieron obligados a tratar
estas temáticas.
Pamela Arévalos
Marcelino Ríos, acusado por el femicidio de Pamela, está prófugo. |
La Retaguardia asistió a la convocatoria en la Ciudad de Buenos Aires y
registró algunas de las miles de historias que se movilizaron en la tarde
del miércoles 3 de junio.
XX Aráoz es referente del Barrio 21 de septiembre de Campana. Allí una joven
fue asesinada por su pareja hace 20 días. “El 21 de mayo a las 3 de la madrugada
nos vienen a avisar que Pamela Arévalos estaba muerta. Cuando llegamos nos
encontramos con que el concubino con el que estaba le metió un disparo en
la nuca. Ella tenía nada más que 15 años y esa noche había decidido dejarlo,
pero él la encerró. Él tenía la llave de la casa y ella no podía salir;
le metió un disparo en la nuca y ella cayó en la cama muerta. Hasta el día
de hoy Marcelino Ríos de 26 años, paraguayo y con 2 homicidios más en Paraguay,
está prófugo. El bebé tiene 5 meses y lo está criando la familia de Pamela”,
relató Aráoz.
La causa se encuentra en la fiscalía de Campana y los vecinos exigen justicia.
Reclaman que el caso se visibilice, ya que solo se hizo notorio en Campana.
Karem Arias
El micro en el que llegaron familiares y vecinos de Karem. |
En la Plaza de los Dos Congresos pudieron verse muchos grupos de familiares
acompañados por sus vecinos. Tal fue el caso de los padres y la hermana
de Karem Arias, que llegaron a la convocatoria en un micro junto a sus vecinos
del barrio de Ciudad Evita.
“Estamos en la marcha porque a mi hermana la mató el novio de un disparo
en la cara hace un mes y medio, está preso, pero queremos que la justicia
se ponga firme en la condena que le tiene que dar porque todavía no tiene
juicio. Estamos con todas las expectativas positivas porque sabemos que
la justicia va a poder condenarlo como tiene que ser y que pague lo que
le hizo a mi hermana, que tenía 16 años”, contó Isabel, hermana de Karem.
Como todos, Isabel veía los casos de femicidios a través de la televisión,
pero nunca pensó que podría pasar en su familia: “siempre me pregunté y
decía ‘mirá lo que pasa con estas criaturas’, y tener ahora que
estar presentando algo así, viviendo algo así, la verdad que es muy feo,
entendemos a todas esas familias, los entendemos y sabemos que es horrible
y estamos ahora en esta situación, con mi mamá, mi papá que tratan de salir
adelante, de estar bien, es muy duro perder a su nena de 16 años en manos
de una persona a la que no le importó nada su vida. Estamos tratando de
salir adelante, de estar acá en esta marcha para que la justicia se dé cuenta
de que no puede haber más chicas que pierdan la vida por personas, hombres,
que no les importa la vida de los demás”.
Karem, como muchas víctimas, no había hecho denuncias previas contra el
agresor: “no contaba mucho de lo que pasaba en la relación, amigas de ellas
contaron que quería dejarlo pero no sabía cómo y tenía miedo, pero nosotros
como familia no lo sabíamos. Tuvo la maldita desgracia de haber pasado por
esto y no estar nosotros al tanto de todo lo que pasaba, no pudimos ayudar
en nada”, afirmó Isabel, quien relató que durante esta concentración frente
al Congreso muchas personas se acercaron a su mamá para darle números de
teléfono y contactos para que pueda asesorarse y saber qué es lo que tiene
que hacer para que haya justicia para su hija.
Laura Iglesias
Laura era trabajadora social del Patronato de Liberados y el 29 de
mayo de 2013 fue violada y asesinada en Miramar. El lunes pasado comenzó
el juicio contra el único imputado por este crimen, Esteban Cuello. Sin
embargo, los familiares y compañeros de Laura exigen que se siga investigando.
Ximena trabaja en la Universidad de Luján y forma parte de un colectivo
de trabajadores sociales. El miércoles estuvo presente en la Plaza de los
Dos Congresos: “a partir de lo que sucedió con el asesinato de Laura Iglesias,
nos sumamos a acompañar a las compañeras que trabajan en el Patronato de
Liberados de la provincia, a la familia, en el reclamo de verdad y justicia,
principalmente vinculado a que Laura Iglesias era trabajadora social y su
asesinato se dio en el marco del ejercicio de la profesión y por lo tanto
salimos a reclamar en contra de las condiciones de precariedad laboral y
exigir que se retomen las líneas de investigación que fueron abandonadas
para realmente encontrar los culpables materiales e intelectuales de su
asesinato”, dijo a La Retaguardia.
Junto a Ximena se encontraba Alejandra, que trabaja en el Patronato de Liberados
de la zona de Olivos: “Laura Iglesias trabajaba en el Patronato que supervisa
Miramar, que es el lugar donde la mataron. Lo que nosotros necesitamos es
que se esclarezca y se identifique a quienes la mataron y hacer hincapié
en que fue un asesinato dentro del marco laboral y no hacerlo pasar como
un tema más de inseguridad como lo quieren hacer pasar. Nosotras le pedimos
primeramente a Daniel Scioli, a Ricardo Casal como ministro de Seguridad
de aquel momento, y a Alejandra López que es la directora del Patronato,
que no dejen esto en blanco y que se hagan cargo, y que si no lo pueden
hacer tendrán que dejar los cargos”.
Alejandra remarcó que el crimen de Laura tuvo que ver con su condición de
trabajadora y de mujer: “tiene toda la precariedad con la que se trabaja,
primero por ser trabajadora, por ser trabajadora social, y por ser mujer
por sobre todas las cosas. Aparte en el Patronato trabajamos con una población
en la cual también la mujer cumple un rol importante, entonces estamos como
mucho más expuestas que tal vez en otras profesiones y en otro rol”.
Los Refugios
“Es un día muy importante porque es una marcha masiva, se reclama que
se reglamente la ley (de Protección Integral de las Mujeres Nº 26.485, aprobada
en 2009 por el Congreso), porque está sancionada pero nunca se reglamentó,
están mirando para los costados, además se necesita más presupuesto, los
feminicidios aumentaron, los homicidios vinculados también, y necesitamos
más refugios, necesitamos que las autoridades presten más atención porque
firman acuerdos internacionales que después no terminan de concretar. Va
a haber que hacer presión desde las bases, que es donde se muere la gente”,
afirmó Claudia Bani, coordinadora del refugio para mujeres víctimas de violencia
doméstica de la Ciudad de Buenos Aires. Bani forma parte además del Consejo
Académico del postítulo de la especialización superior en educación sexual
integral que se dicta en el Joaquín V. González de manera pública y gratuita.
El refugio que ella coordina es el único de la Ciudad de Buenos Aires para
esta problemática: “el lugar tiene capacidad para 50 personas pero se cuenta
a las mujeres con sus hijos, y hay mujeres que tienen 5, 6 chicos, –explicó–
se necesita más pero no solamente más refugios, sino también acciones concretas
de educación, de prevención, de trabajar inclusive en la justicia porque
tenemos jueces que todavía no se enteraron que las mujeres se mueren. El
refugio tendría que ser la última instancia, habría que empezar trabajando
en las escuelas, en salud, en la justicia, en los medios masivos de comunicación,
y en los mensajes que vos recibís de los medios que son justamente los que
exacerban los estereotipos de género y la violencia”.
Bani consideró que una de las consecuencias de la marcha será que muchas
mujeres comenzarán a animarse a denunciar: “creo que a partir de ahora la
línea de Atención a Víctimas de Violencia de Género (de la Ciudad), el 0800-666-mujer
(0800-666-8537) explotará, porque si no hay difusión la persona no se entera,
no sabe que tiene que hacer la denuncia, que tiene derecho a la denuncia,
a ser escuchada, que tiene la posibilidad de pedir la exclusión, de pedir
medidas cautelares, de vivir de otra manera. No están enteradas”.
Efectivamente la convocatoria #NiUnaMenos generó una gran visibilización
de la problemática. No caben dudas de que si se llegó a esta marcha masiva
y heterogénea fue porque existe un movimiento de mujeres y organizaciones
que desde hace tiempo viene planteando la necesidad de poner la violencia
de género en agenda. De ahora en más quedará también la responsabilidad
del movimiento de mujeres y las personas que trabajan en estos temas de
llenar de contenido esta consigna. Y esto se relaciona con ir al fondo con
las causas; una de ellas tiene que ver, por ejemplo, con la educación sexual
integral, es decir reclamar que en todas las escuelas haya educación sexual
integral con perspectiva de género y con una mirada de derechos, como así
también la implementación de leyes, programas, políticas públicas que vayan
en consonancia con la eliminación de la violencia de género.
www.laretaguardia.com.ar/2015/06/paso-el-niunamenos-quedan-las-victimas.html