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Paraná Metal otra vez en el ojo de la tormenta
Por Equipo de Comunicación CTA Rosario -
Wednesday, Sep. 02, 2015 at 4:22 PM
1 de septiembre de 2015. Por Equipo de Comunicación CTA Rosario | La semana pasada 180 trabajadores de Paraná Metal recibieron telegramas de preaviso de despido. En un nuevo capítulo de una historia turbulenta, la firma hoy propiedad del Grupo Indalo de Cristóbal López entra nuevamente en un cono de sombra. La desidia empresarial, los aprietes a los gobiernos y el rol del Estado en una empresa en la que, pese a ser la tercera autopartista de Sudamérica en capacidad de producción, no es afectada por la crisis del sector porque las políticas de comercio exterior no le da un espacio concreto en el esquema productivo.
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Hablar de Paraná Metal es hablar de un pedazo de historia, no sólo para Villa
Constitución sino para la región en su conjunto. Con cortos períodos de cierta
tranquilidad, la autopartista pivotea entre épocas de crisis profundas y constante
incertidumbre.
La recepción de 180 telegramas de preaviso de despido para el 31 de octubre,
es una parte más de una historia de pauperización, desguace, cambio de manos
y estrepitosa reducción de personal. Este 2015 el punto de inflexión se dio
tras la muerte de Gerardo Lauck, aplastado por una percha de una cuchara que
pesaba unos 400 kilos. Las discusiones posteriores sobre seguridad y condiciones
de trabajo llevaron a poner en duda la continuidad de la planta poco después
del velatorio.
“En aquella discusión, cuando le plantearon cómo pensaban seguir y cuál era
la perspectiva de mejoramiento de la planta, el Gerente General, dijo que si
la empresa no conseguía afianzar la producción que estaba desarrollando y tenía
en vista, cerraba la planta el 30 de septiembre. Recordemos que estábamos hablando
de la muerte de un compañero”, destacó Leandro Del Greco, miembro de la Comisión
Interna de Paraná Metal, integrante de la UOM Villa Constitución y referente
de la CTA Autónoma villense. Del Greco, ingresó a la trabajar en una empresa
contratista en 1995 pero pasó a planta recién en 2005. Desde entonces vivió
varias situaciones de conflicto (ver debajo).
El 29 de Junio de 2015 la empresa planteó que si no había trabajo ni concreciones
de contratos, cerraría la planta el 30 de septiembre. Fue entonces cuando se
abrieron canales de diálogo con el Ministerio de Trabajo de la Nación. En aquel
momento los empresarios plantearon posponer el cierre por existir avances con
pedidos de producción de Ford, que le permitirían cierto crecimiento para el
año siguiente, pero, sin dar mayores detalles, afirmaron que no descartaban
reestructurar la empresa. “Eso fue dando ánimo, pero igual siguieron las tratativas,
incluso hubo llamados del Ministerio de Industria a la empresa para que se sigan
concretando tareas”, detalló el metalúrgico.
Leandro Del Greco
La realidad es que desde que López se hizo cargo de la planta
en 2009 y principalmente desde la reapertura hace tres años y medio atrás, hay
suspensiones permanentes. Sólo este año, entre abril y agosto, no las hubo,
por gestiones obreras para incrementar líneas de trabajo. Lo que llama la atención
de los operarios es que el anuncio de cierre no se condice con las perspectivas
de mejora para el 2016. Algo que invita a pensar, sin ser una certeza en absoluto,
que se trata más de un apriete al gobierno actual y al que viene que de una
voluntad definitiva de desprendimiento de la gigante metalúrgica. La patronal
viene pivoteando entre reparaciones internas, avisos de cierre a largo plazo
y líneas de trabajo que se abren de cara al año próximo.
Por ahora existe un canal de diálogo abierto con la cartera laboral nacional,
que se lleva adelante a través la UOM nacional. Según las propias autoridades,
las conversaciones de Carlos Tomada y su par del Ministerio de Industria, Debora
Giorgi, se realizaron en duros términos con Fabian De Souza, uno de los dueños.
“Nosotros tenemos la decisión de seguir laburando y buscar alternativas de continuidad,
con la empresa o sin ella. Es muy difícil si no hay producción, pero nuestra
idea en estos 60 días es buscar alternativas, pelearla y continuar con las fuentes
de trabajo. Desde la empresa está claro que algo están buscando, el tema es
que no sabemos si es dilatar el tiempo y terminar en el cierre definitivo o
continuar con la producción y ejercer presión mediante la amenaza de cierre”,
expresó Del Greco.
Protestas en 2009
El tema no es la crisis
“A nosotros la crisis internacional del sector automotriz no nos afecta para
nada hoy, porque no hacemos nada para esa industria. El problema acá es estructural
y está vinculado a la política nacional de intercambio comercial bilateral con
Brasil desde hace 20 años o más. El problema es que los autos tienen la mayor
cantidad de piezas importadas. Hay muchas piezas de la industria automotriz
que nosotros podemos hacer. Tenemos los herramentales, las matrices, ya se hicieron
en el pasado. Paraná Metal es la tercera planta más importante de Sudamérica
en el sector autopartes, para el que hoy no producimos nada, salvo alguna línea
de campanas, discos y volantes para alguna empresa. A Paraná Metal la crisis
de la industria automotriz no le va ni le viene. Ojalá de los 600 mil autos
que se venden pudiéramos hacerle la campana y los discos a una parte. Para hacer
los blocks de motor para todos, necesitaríamos tres Paraná Metal, no una. El
problema es que el auto que te venden en la concesionaria de la esquina de tu
casa tiene un 80% de composición extranjera. No se hacen en Argentina”, aclaró
el referente de la Comisión Interna.
Para el joven referente, la industria automotriz da para mucho más de lo que
se hace actualmente en territorio nacional. “Pero lo que ninguno de esos actores
puede hacer es jugar con nosotros, somos seres humanos. La empresa siempre piensa
cuánto pone, cuánto saca y se lleva. No espero que Indalo diga ‘pobre gente’.
Pero sí lo espero del Estado, que debería defender nuestros intereses. Esto
es un nuevo conflicto social”, expresó.
Los últimos 20 años paso a paso
Leandro Del Greco, señaló algunos momentos clave de la historia que le tocó
vivir dentro de Paraná Metal en los 20 años que lleva trabajando en la planta.
De allí, esta cronología.
- 1995 /96 -Pasa de ser Autolatina, de Ford y WV, a Metcon de Ford.
- 1998/99 - Suspensiones de personal propio y contratistas.
- 2000 - Ford se desprende pasando a ser Paraná Metal, subsidiaria de la
misma empresa.
- 2002 – Un grupo de gerentes encabezados por José Cenoz toma la dirección
de la planta. Se trabajó hasta 2008 sin cortes y crecimiento ininterrumpido
- 2007 – Procedimiento preventivo de crisis
- 2008 * En diciembre cierra por primera vez la planta. No obstante, en
ese año hacían 34 mil blocks por mes, 380 mil al año, siendo el mejor momento
de producción. * El 10 de diciembre la empresa se concursa
- 2009 – En febrero Cristóbal López (Grupo Indalo) realiza una opción de
compra. Pone gente en áreas clave para analizar los números. Posteriormente
extiende por seis meses más esa opción. En ese momento el plantel abarcaba 796
operarios de la UOM, 260 contratistas incluidos los compañeros del comedor (10);
68 fuera de convenio y 68 de planta afiliados a Asimra.
- Entre 2009 y 2010 Sólo 135 personas de Paraná Metal propios y unos 60-
70 de contratistas aceptaron retiros voluntarios.
- 2010 * El 22 de Enero el Grupo Indalo de Cristóbal López, realiza la
compra definitiva
* El 4 de agosto el concurso sigue en marcha. Ford, su principal cliente, se
retira y López le envía a la jueza un oficio diciendo que se retiraban y que
dispusiera de la planta para hacer lo que quieran: pidió la quiebra. Esto da
lugar a uno de los conflictos más importantes de la región, por el cual los
metalúrgicos permanecieron 34 días en la autopista Rosario – Buenos Aires. Desde
el 4 de agosto de 2010 hasta el 1 de febrero de 2012 la planta permanece cerrada
con una guardia mínima de aproximadamente 15 compañeros
- 2010 -11 – El 31 de enero 496 trabajadores quedan fuera de la planta.
- 2012 – Febrero encuentra una reactivación de las tareas, se realizan
tareas de limpieza de la planta y reparación de los equipos por un lapso de
10 meses donde se alterna tiempo de trabajo con suspensión. En diciembre se
cola por primera vez después de 27 meses de no producir. Y comienza una leve
recuperación de la producción que aunque muy distante de lo necesario, pero
se amplían las suspensiones.
- 2013-2014 se transita con altibajos en los niveles de producción y constante
incertidumbre del futuro.
- 2015 – 27/28 de agosto llegan telegramas de preaviso de desvinculación
para 180 trabajadores. Amenazan con cerrar definitivamente la planta por falta
de trabajo.
Equipo de Comunicación CTA Rosario
Fotos: Indymedia Rosario
www.ctarosario.org.ar/article2238.html