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Crece La Brecha Entre Ricos y Pobres
Por Prout Argentina -
Monday, Aug. 12, 2002 at 11:46 PM
Desigualdad Social
La brecha entre los que más y menos ganan es récord
Es de 46,6 veces, mientras que hace un año, era de 33,9 veces. La
crisis y la desocupación hizo que los ingresos mensuales de la gente
de menores recursos bajara de 43 a 29 pesos. En cambio, los ingresos
de los hogares más ricos cayeron apenas de 1.451 a 1.346 pesos por
persona.
La brecha entre los que más y los que menos ganan alcanzó un récord
en el país: 46,6 veces. Hace un año, esa brecha era de 33,9 veces. Y
el salto se produjo porque la rebaja de salarios y el aumento de la
desocupación redujeron un 32,6 por ciento los ingresos de la gente de
menores recursos: bajaron de 43 a 29 pesos. En cambio, los ingresos
de los hogares más ricos cayeron apenas el 7,2 por ciento: de 1.451 a
1.346 pesos por persona.
De este modo, según datos del INDEC publicados este domingo por
Clarín, cada una de las 1,5 millón de personas que viven en los
300.000 hogares más pobres de la Capital y el Gran Buenos Aires
dispone, en promedio, de casi 29 pesos por mes. En contraste, las
647.000 personas que habitan en las 300.000 viviendas más ricas
tienen ingresos de 1.346 pesos por cada integrante de la familia.
A todo esto hay que sumarle la inflación. Si se considera la suba de
los precios, cada persona más pobre perdió más del 50 por ciento de
su poder adquisitivo, mientras los de los hogares más ricos
resignaron casi el 25 por ciento.
La torta no solo es cada vez mas chica, sino que cada vez está peor
distribuída. De este modo, los integrantes del 10 por ciento de los
hogares más pobres, que en mayo de 1998, recibían el 2,5 por ciento
del total de los ingresos, ahora sólo tienen el 1,7 por ciento. En
cambio, los del 10 por ciento más rico subieron del 28,4 al 31,7 por
ciento del total de los ingresos.
Pero la situación es en realidad peor que lo que muestran las cifras.
Los analistas enfatizan que esta desigualdad social sería superior
porque sólo considera los ingresos y no la riqueza acumulada (como
propiedades o inversiones).
Y además, porque los sectores más ricos declaran menos ingresos por
razones impositivas, mientras los más pobres declaran más de lo que
realmente reciben por la vergüenza de declarar tan poco.
El camino que siguió esta brecha es un fiel reflejo de lo que sucedió
con la Argentina.
En los años 70, cuando el INDEC comenzó con estas mediciones, la
brecha era de 6 veces. En los 80 se amplió a 20, con un pico de 27,1
veces durante la hiperinflación de 1989. Retrocedió al comienzo de
los 90, y comenzó a subir sin pausa a partir de 1993.