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BENDITA POLICÍA
Por reenvío agencia walsh -
Thursday, Jul. 10, 2003 at 9:18 AM
LA PRIMERA FUGA (Nota de tapa de El Urbano Sale el viernes 11)
En nuestra ciudad las máximas figuras de la seguridad, hasta hace unas semanas,
están complicados con sus pasados. El ex comisario de la 24°, Pablo Insaurralde,
esta involucrado en casos de prostitución de menores. El ex jefe de inspección
7°, con sede en el Comando Radioeléctrico, Alberto Antegiovanni, está denunciado
por torturas a un militante comunista a fines de los 80’.
Por Hugo Cravero
Los comisarios Pablo Insaurralde y Antonio Antegiovanni fueron, hasta la masiva
fuga de 22 presos de la seccional 24, las máximas figuras de la seguridad en
nuestra ciudad. Pero muy pocos, casi nadie, sabe que tanto el que fuera
responsable de la seccional 24° y el ex Jefe de Inspección de 5° zona,
respectivamente, están involucrados en hechos delictivos.
Insaurralde estuvo a cargo de la seccional local desde el mes de febrero de este
año hasta los últimos días de junio, igual que Antegiovanni de la inspección de
zona. Éste fue Jefe de la seccional 7° de calle Cafferata al 300.Allí a finales
del año 2001, y mediante escuchas telefónica legales Insaurralde estuvo
involucrado en casos de prostitución infantil.
Según un informe publicado en la página web http://www.postalesdelsur.com del
periodista Carlos del Frade e incluido en su último libro “Pibes”, cuando
Insaurralde era el Jefe de esa dependencia policial fueron escuchadas legalmente
madamas que regenteaban tres locales donde chicas venidas del norte de Buenos
Aires, de Santa Fe capital, de Formosa y del Paraguay, muchas de ellas menores
de 18 y 21 años, ejercían y ejercen la prostitución.
Los locales en cuestión, “El Monito” de Callao 121bis, otro en las misma calle
al 200 y un tercero en frente de la terminal de Ómnibus Mariano Moreno en Santa
fe y Cafferata a solo 3 cuadras de la Comisaría 7°, “arreglaban” con los
policías los documentos de las menores, extendiendo certificados de extravíos
adulterando las edades de las jóvenes. Las comunicaciones se obtuvieron entre
octubre y noviembre de 2001. En estás llamadas telefónicas unas tales Mirta,
Lidia y Silvia dialogaban sobre la llegada de jóvenes procedentes de distintos
lugares del país e incluso de Paraguay.
En esos diálogos las madamas comentaban las edades de las chicas y la necesidad
de “arreglar con Fornero los documentos de las mismas”. En una de las escuchas
se presenta el problema con minoridad, que aunque los DNI estuviesen modificados
pedían 50 $ de coimas. ““Decile que vos vas a llamar a la 7ª. Averiguá bien.
Hablá con Fornero. Decile que ahí está Minoridad. Que vos no tenés ninguna menor
pero que te están pidiendo 50 pesos que hay que colaborar. Que Fornero se vaya
hasta ahí. Que te de un recibo de los 50 pesos que vos le das...”, le aconsejó
Silvia a Lidia por teléfono.
EL DIALOGO CONTINUA
-Es gente de Moralidad que está buscando problemas con nosotros. Le queremos
hacer cerrar el escondite. Busca mierda.
-¿Todas son mayores de 22 años?.
-La Rodríguez tiene 19 pero tiene documentos de 22.
-Ya tenemos el arreglo de lo nuestro.
-¿Ya le dieron 50 pesos en Callao?.
-Acá anduvieron en todos los hoteles.
-Me estoy yendo para la comisaría...
Dos días después, Lidia tranquilizó a su interlocutora: “Hablé con Fornero. Me
lo presentó al jefe. Le dieron la plata”. El Jefe era Pablo Insaurralde y Hugo
Alberto Fornero el sub.
Tanto a Insaurralde y a Fornero lo trasladaron de la comisaría 7° cuando este
tema saltó a la luz pública, mas la investigación no siguió avanzando a tal
punto que los prostíbulos siguen abierto y la prostitución de menores sigue
proliferando en la ciudad de Rosario
DE TORTURADOR A JEFE
Antegiovanni se presentó a este periodista como un hombre amable. “Vengo a
trabajar”, dijo. Era febrero de este año y en una estación de servicio local el
espigado policía se presentaba como el aire nuevo y necesario. Pero lo que nunca
se dijo es que Alberto José Antegiovanni estuvo involucrado, por lo menos, en un
caso de privación ilegitima de la libertad seguida de apremios ilegales en plena
dictadura contra un militante comunista.
El 22 de agosto de 1979 Sergio Hugo Schilman fue detenido de manera irregular.
El militante fue alojado en la División de Informaciones de la policía desde las
1:00 del día 23 hasta las 20:00 del día 28. Al salir en libertad Schilman
denunció públicamente torturas, agregando “durante mi detención he sido víctima
de todo tipo de tormentos que pusieron en peligro mi propia vida...las torturas
de que fui objeto con posterioridad a las 12.30 del 24 de agosto de 1979 fueron
de tal magnitud que motivaron mi internación en terapia intensiva de CAMI,
ubicado en Pellegrini 1353 de esta ciudad (Rosario), donde estuve al borde de la
muerte".
El ex responsable de zona no estuvo solo en la tortura, lo acompañó entre otros
Hugo Carlos Colombo que por entonces como Antegiovanni eran Oficiales
subayudante, y que irónicamente juntos a fines de los 90 estuvieron a cargo de
el área de Robos y Hurtos de la policía provincial. Aunque ambos negaron su
participación en la tortura de Schilman fue el por entonces delegado interventor
de la UR II, teniente coronel Rodolfo Enrique Riegé, quien escribió el 25 de
junio de 1981 que "el procedimiento policial en el cual resultara detenido el
causante así como su permanencia, alojado en la división Informaciones de la
Unidad Regional II de la Policía de Rosario, durante el período comprendido
entre los días 23 al 28 de agosto de 1979, fue concretado bajo "control
operacional" producto de órdenes impartidas por la ex jefatura de Área 211
(actual Comando Sub Zona 21) del Comando Cuerpo Ejército II, habiéndose ya
instruido actuaciones sumariales con motivo de presuntas irregularidades
cometidas
por personal policial bajo control operacional durante esas fechas". Entre los
sumariados se encontraba Antegiovanni.
Con anterioridad, el 4 de noviembre de 1980, la doctora María de las Mercedes
Caballero, del poder judicial de la provincia de Córdoba, sobreseyó a los
policías rosarinos José Carlos Scortechini, Carlos Ulpiano Altamirano, Lucio
César Nast, Nicolás Citriglia, Alberto José Antegiovanni y Enrique Daniel
Ferrara, imputados de los delitos de "privación ilegítima de la libertad y robo
calificado o reiterados".
LAS DOS FUGAS
La huida masiva de la 24 aceleró los trámites para la gran fuga, pues este
informe, que irónicamente se terminó de escribir la misma noche de los sucesos
venía a contarle a los vecinos que clase de policías nos daban (y nos dan) la
tan mentada seguridad. Sabido es la vinculación directa de la policía con el
juego clandestino, la droga, prostitución y el robo. Todos los sabemos pero poco
se cuenta con pruebas.
Insaurralde y Antegiovanni son cobardes como tantos otros en la fuerza. Coimeros
y torturadores, juntos. Ellos nos “cuidan”, pero quien nos “cuida” de ellos. Los
dos comisarios fueron mimados por un sector corrupto del periodismo local y
amparados por el poder político que sabe muy bien de poner y sacar jefes en las
seccionales.
Habrá que estar al tanto de las cosas que pasen con estos milicos, pues, y como
suele pasar, cuando el tema se enfríe quizás estos policías vuelvan a estar a
cargo de comisarías sumando delitos.
zurdo puto
Por garchin -
Friday, Jul. 25, 2003 at 8:58 AM
lagarchacronica
CRAVERO SOS UN TRAIDOR. ANTEGIOBANI TE DA PLATA Y TARJETAS DE MOTEL Y PORQUE TE QUEDO DEBIENDO LO ESCRACHAS. SOS UN ZURDO MISERABLE...
comedor
Por rodolfo -
Sunday, Jul. 24, 2011 at 5:37 PM
c_cacho54@hotmail.com
el ex- crio mayor antigiovvani, alias el gringo, que figura en el listado borgonovo del SI de la URII en los años 75 al83, usted sabe señor cravero que todos los viernes a la noche va a cenar con su esposa y es agasajado por el monito codina a su parrila donde giusepe