IMPRESIONES DEL 2º PARLAMENTO MAPUCHE
Por Hernán Scandizzo ((i)) - Thursday, Oct. 16, 2003 at 4:54 PM

La mañana era fría. Cerca de las 7 comenzó el Segundo Parlamento Mapuche en el paraje Buenos Aires Chico. El 11 de octubre había llegado. Unas 80 personas reunidas en torno al rewe hacían su nguellipun (ceremonia espiritual) antes de dar paso a las deliberaciones.

Tres banderas mapuche tehuelche flameaban en el patio de la Escuela Nº 93, a 5 kilómetros de El Maitén. Varios ñorkin sonaban y su eco se multiplicaba entre los cerros, junto al del kultrun. El muday regaba el suelo, volvía a la tierra, en el noroeste del Chubut. Un nguellipun para agradecer y para pedir un buen pensamiento. Un buen pensamiento para llegar todos a una palabra que los resuma y reúna. Una palabra para seguir la lucha.

Pasadas las 9 de la mañana comenzó el traslado de bancos y sillas a un salón y fueron dispuestos en círculo. Poco a poco se sumó más gente, llegaban de Esquel, Comodoro Rivadavia, Puerto Madryn, Bariloche, Villa La Angostura, El Bolsón. Llegaban de la meseta, la costa y la cordillera. De las comunidades mapuche y mapuche tehuelche Lago Rosario, Costa del Lepá, Futa Huau, Vuelta del Río, Sepúlveda, Emilio Prane, Mariano Epulef, Pillan Mawida, Gualjaina, Chacay Oeste, Sierra de Gualjaina, Cañumil, Katrawletuaiñ, Napal, Paichil Antriau, Ancalao y Quintriqueo. Más de 100 personas, del campo y de la ciudad, colmaban el salón. Y con el correr de las horas serían más.

Uno a uno se presentaron y luego se abrió el temario: la resistencia a un inminente desalojo en la Comunidad Vuelta del Río encabezó la lista; también la situación de tierras de otras comunidades; la indiferencia del Estado ante los reclamos de obras públicas en zonas rurales; las trabas impositivas y sanitarias que perjudican la producción (ver Traficantes de carne http://argentina.indymedia.org/news/2003/10/142242.php); la persecución jurídica; la criminalización de la lucha; el avance minero; la espiritualidad. Un tratamiento aparte – y fuera del temario – recibió la relación con los medios de comunicación y con la sociedad no mapuche, generándose ríspidos debates.

Luego se dio paso al temario y cada punto llevaba a la relación con el Estado. Y ante quienes proponían seguir entregando petitorios, levantando firmas y apelando a la buena voluntad de los funcionarios de Estado, surgieron los testimonios de lucha de las comunidades Quintriqueo, Prane, Futa Huau, Huisca Antieco, Vuelta del Río. Comunidades que recuperaron su territorio o que evitaron desalojos. Y cómo el Estado no iba a estar en el centro del debate. Qué otra cosa podía esperarse, si la cuestión de fondo es la reorganización de un Pueblo invadido por dos estados, Argentina y Chile.

Llegó la hora del almuerzo, nuevamente trasladar los bancos. Platos con humeantes guisos poblaban las largas mesas. Charlas amenas y discusiones políticas. Y volver al salón a continuar el intercambio de ideas y las discusiones.

La batalla de los 15

Pronto el ridículo interrumpió. La directora de la escuela no sólo había cedido el establecimiento para la realización del Futa Trawun sino también para el festejo de un cumpleaños de 15, durante la noche... Pretendía que ambas actividades se realizaran en paralelo. Directora y jefa regional de Supervisión de Escuelas se presentaron para explicar lo inexplicable y proponer lo imposible. A los presentes les costaba entender lo absurdo.

Al principio se pensó en buena voluntad de la docente pero incapacidad para comprender la situación; después se hizo evidente su desinterés, sus argumentos la ponían al descubierto: había que poner trabas a la continuación del parlamento. No hubo caso. La gente no cedió. El Futa Trawun siguió su curso. El cumpleaños se celebró en el salón municipal. El absurdo busca dramaturgo.

A poco de iniciarse el parlamento, enterada de la situación, la diputada provincial Césaro (PJ) había ofrecido su mediación con espíritu samaritano. Los presentes aceptaron la propuesta, no porque inspirara confianza sino para que abandone el recinto. Horas después volvió y dijo haberse comunicado con la ministro de Educación del Chubut y haber hecho viajar a la jefa de Supervisión de Escuelas hasta Buenos Aires Chico Dijo sentirse orgullosa al permitírsele mediar y tal vez esperaba unas palabras de reconocimiento o un aplauso cerrado, pero no hubo nada de eso. Sí estuvo a punto de recibir el premio correveydile.

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Superado el incidente continuó el debate. El Estado volvió al centro de la escena y continuó allí hasta las 19, que se dio por concluida la jornada. Las rondas de mate se multiplicaron. Más tarde un dúo de titiriteros de El Bolsón puso en escena La leyenda del Pañil, basada en el reciente intento de desalojo de la comunidad Vuelta del Río. Una obra estímulo para la resistencia ante los atropellos y para la recuperación del lawen (la medicina tradicional), otra forma de resistencia. (El pañil es una planta con múltiples cualidades curativas.)

Llegó la cena y luego el turno del Cine Club Ambulante de la Biblioteca Popular Osvaldo Bayer, de Villa La Angostura. Se sucedieron videos sobre la lucha mapuche y continuaron las charlas hasta entrada la noche.

Por la mañana se realizó un nuevo nguellipun. Y el parlamento continuó al aire libre, aprovechando el día soleado. Los debates siguieron hasta el mediodía y tras el almuerzo se prolongaron hasta la tarde. Algunos temas se agotaron, otros no. Algunos acuerdos se alcanzaron otros quedaron a mitad de camino. Algo quedó claro, como lo destaca el pronunciamiento final, “el Futa Trawun es nuestro único ámbito de representación genuina y colectiva para acordar estrategias de lucha como Pueblo, así fue para nuestros kuifikeche y así es para nosotros”. (ver Pronunciamiento http://www.argentina.indymedia.org/news/2003/10/141126.php )

Hernán Scandizzo

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