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Caleta Olivia: Más represión y nuevas detenciones
Por una -
Friday, Oct. 01, 2004 at 3:10 PM
Ayer un corresponsal informaba que alrededor de las 23.00 Hs., un gupo de 12 compañeros lograron entrar y se subieron a un tanque de Termap, reclamando la libertad de los 6 detenidos y denunciando al gobierno provincial y municipal por no cumplir con el convenio firmado oportunamente, y no garantizan los puestos laborales. Reclamaban hablar con las operadoras e ingresar a travès del convenio petrolero. Mientras tanto un grupo de unas 50 mujeres le hacían el aguante desde afuera de la Planta. Estaban rodeados de policías y guardias de seguridad de la empresa y la situaciòn era muy tensa.
Hoy la agencia de noticias lavaca.org hizo circular el siguiente reporte detallando más la situación:
Piden trabajo. Piden la libertad de los 6 detenidos. Y pronto van a pedir la renuncia del intendente, dicen en Caleta Olivia. Ayer, después de las 7 de la tarde, 30 desocupados volvieron a entrar a la planta de tanques del consorcio petrolero Termap: fueron golpeados y mojados durante horas por personal de seguridad privada traída de Chubut que actuaba con la cara cubierta. Además, según denuncian quienes están ahora cortando la ruta 3, cinco mujeres -una de ellas embarazada- fueron detenidas y llevadas a la misma comisaría donde están alojadas las otras tres mujeres presas, por las que se pedía -justamente- la liberación.
Los acontecimientos en Caleta Olivia empiezan a precipitarse: a los presos, se suman más detenidos y a los manifestantes, manifestantes de otras localidades del sur, como Las Heras o Pico Truncado, donde desde hace una semana grupos de desocupados tomaron la Municipalidad. En este último caso, la jueza falló a favor del derecho a la protesta social.
"Esto es el resultado de que las autoridades no cumplieron con el acta de acuerdo que prometía trabajo genuino para los compañeros", dice Hugo Iglesias, uno de las seis personas que están presas desde septiembre, en charla telefónica con lavaca. Desde su celda, sigue los acontecimientos de Caleta por radio y por teléfono y está muy indignado. " Por más palo y cárcel que pongan, esto no va a parar. Porque los compañeros no tienen miedo, están desesperados".
Mientras esas 30 personas continuaban arriba del tanque de Termap, otra cantidad cortaba la ruta, para que se les permitiera entregarle comida y ropa seca a los que protestaban, ya empapados por las mangueras y los sistemas antiincendio que fueron prendidos por la empresa para amendrentarlos
El que medió fue el jefe de la Policía local, que hizo lo que los funcionarios públicos debían hacer, pero todavía no aparecieron. Gracias a su intervención el corte de rutas fue levantado durante la hora en que se les permitió acercarles a los manifestantes alimentos y vestimenta." Es que en un pueblo chico todos nos conocemos, la polícía no puede ir a pegarle a un vecino, porque además ellos y nosotros pasamos las mismas necesidades. Por eso tuvieron que traer gente de afuera para reprimir".