Julio López
está desaparecido
hace 6436 días
versión para imprimir - envía este articulo por e-mail

Ahi vienen los indios!
Por re: Cirilo Acuña - Wednesday, Oct. 13, 2004 at 8:46 PM

AIPIN, 11 de octubre.– El 12 de octubre de 1942 inaugura lo que los mexicas llamaron “la gran noche.” Abre un período doloroso cuyas consecuencias persisten en nuestros días. El llamado “Descubrimiento de América” y la “Conquista” significaron el sacrificio del 80% de la población en este continente.

Ahi vienen los indio...
bolivia_sh.jpg, image/jpeg, 570x451

La historia nos ofrece, a pesar de su parcialidad, ejemplos de actos de felonía, de degradación humana, cometidos por los “descubridores-conquistadores” en contra de los habitantes originarios de estas tierras, acciones que no creo que puedan tener perdón jamás. Colón, Cortés, Pizarro, Álvarez Cabral y muchos otros pusieron el ejemplo y marcaron el sangriento estilo de gobernar con el permiso y apoyo de los monarcas europeos y de la iglesia católica.

En México, cuando el tlahtoani Cuauhtémoc vio perdida la defensa de su pueblo, pidió a todos “cerrar las puertas”, no encender luz, vivir hacia adentro, guardar silencio mientras pasa esta gran noche cuyo término será anunciado por señales claras. En términos populares esto significaba “aguantar callado”, “hacerle al loco”, resistir. Era 1521.

Y la “gran noche” fue cubriendo todo el continente. La explotación más atroz de los naturales llamados “indios” en las minas, los obrajes, el campo y los mares, era la constante. En los lugares en que casi se extinguieron los varones se utilizó la importación de esclavos negros en un aberrante tráfico humano que une a los traficados al doloroso destino de los indígenas. Los intentos de rebelión fueron cruelmente sofocados.

Y así pasaron 300 años.

En los movimientos de independencia, los distintos Estados nacientes arrastraron -de grado o por fuerza- a la “lucha por la patria” a sus indígenas. Los ideólogos apartaron sus ideas; los políticos, sus promesas; y los indios sus muertos.

El pueblo mapuche, heroico defensor de su territorio junto al río Bío Bío, fue masacrado por sus propios gobiernos criollos triunfantes: En Chile mediante la famosa “Pacificación de la Araucanía” y en Argentina mediante la “Conquista del Desierto”. Ambas, acciones encaminadas al exterminio. Algo muy similar fue el capítulo de “Salsipuedes” en Uruguay, contra los charrúas.

Acciones como las anteriores no estuvieron ausentes en México. Para la segunda mitad de 1800, durante la invasión francesa se da el caso de Agustina Ramírez, una india de Sinaloa que para la “defensa de la patria” entregó uno a uno a sus once hijos quedándose en el desamparo. Murió sola, ignorada, implorando la caridad pública,

El triunfo de Don Benito Juárez, indio zapoteca, que es uno de los períodos más brillantes de la Política Mexicana, estableció la nacionalización de la tierra y muchos indios prefirieron levantar sus rudimentarias armas en contra porque querían la legalización de las tierras para sus pueblos.

Ya entrado el 1900, cabecillas y gobiernos “revolucionarios” declararon la guerra hasta la extinción de los indios. Son muy conocidos los casos de las atrocidades en Tomochi, Chihuahua; la captura, muerte o deportación al sureste mexicano de los yaquis y el cerco a muerte en la “Isla del Tiburón” en contra de los seris, que casi se extinguen y que en la actualidad no llegan a 1000 individuos.

El triunfo de la Revolución Mexicana no significó avance real alguno para los indios. Al triunfo de las instituciones se crea el PNR, que luego sería el PRI (Partido Revolucionario Institucional) que va a controlar todo el aparato gubernamental por 70 años y que mantendrá a los indios quietos.

Esta quietud o modorra, este silencio, recogimiento o apatía conforma la mítica conducta del indio. La indolencia es generalizada con escasas excepciones en puntos del continente en que son atacados los pueblos o grupos directamente. ¿Seguían las recomendaciones de Cuauhtémoc, el rey mexica?

Pero algunos volcanes empiezan a mandar señales luminosas: Don Goyo (el Popo), Chichonal y Colima en México; Tunguragua en Ecuador; y otros. Algunos cuerpos celestes y eclipses aparecen. Las corrientes “del Niño” y de “La Niña” se acentúan, así como algunos huracanes provocan desastres que quisieran barrer otros desastres como Chernobil o del del Prestige. La marea roja crece en los litorales y llega a donde nunca había llegado. La temperatura se eleva, se abre un gran hoyo en la capa de ozono y se implantan los Acuerdos de “Libre” Comercio.

¿Cual o cuáles de estos sucesos son o fueron considerados como las señales claras del principio del fin de la “larga noche”? ¿O serían los asesinatos políticos, la impunidad, la corrupción o el narcotráfico? Lo cierto es que para 1980 ya hay un “despertar” indígena detectable. La defensa de los territorios se refuerza. Se nota activismo incipiente en los pueblos indios del continente en las protestas de grupos desplazados por la construcción de represas.

Poco a poco los indios sienten que tienen derechos; que necesitan defenderse, prepararse, participar y se involucran en las discuciones de la OIT por los derechos de los indígenas. Para cuando España pretende celebrar la Gran feria Internacional “Encuentro de dos Mundos”, (1992) los indios ya están de pie y muchos recorren Europa, con los escasos recursos a su alcance, murmurando su oposición y denunciando lo injusto e inhumano de esa celebración.

Asistimos, pues, a un activismo social humanitario primero, político organizativo después. Los pueblos indios de Centroamérica, de pronto sienten la necesidad de reunirse para compartir sus sufrimientos y ponerse de acuerdo para hacer algo. Y van naciendo organizaciones locales de defensa, ayuda mutua y cooperación.

Lo mismo pasa en el sur del continente: en Chile el activismo mapuche conforma dos grandes polos de lucha: El Consejo de Todas las Tierras y la Coordinadora Arauco-Malleco. Argentina, Ecuador, Bolivia y Colombia no se quedan atrás y se hacen grandes esfuerzos organizativos tanto el interior de sus países como de coordinación con los países vecinos.

Desde ese tiempo, los delegados de huarache dan la pelea en los diferentes foros internacionales de la ONU para lograr el Acuerdo 169 de la OIT; el decenio de los Pueblos Indígenas, que termina este año de 2004. Además el premio Nóbel de la Paz recae por primera vez en una indígena: Rigoberta Menchú Tum.

agrega un comentario


wawa
Por re: Cirilo Acuña - Wednesday, Oct. 13, 2004 at 8:46 PM

wawa...
guaga.jpg, image/jpeg, 537x540

la primera foto está hecha sobre una de Sebastian Hacher

agrega un comentario


yano
Por re: Cirilo Acuña - Wednesday, Oct. 13, 2004 at 8:46 PM

yano...
yano.jpg, image/jpeg, 746x475

**********

agrega un comentario