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Catamarca: Andalgalá debatió los daños de la gran minería
Por Vecinos Autoconvocados de Andalgalá - Tuesday, Oct. 19, 2004 at 10:16 PM

En el Encuentro realizado en esa ciudad, salieron a la luz los graves impactos al ambiente, a la salud, al desarrollo sustentable, que el proyecto minero Bajo La Alumbrera provoca en esa localidad catamarqueña y en las provincias de Tucumán, Santiago del Estero y Córdoba. Marta Maffei expuso los privilegios que conceden las leyes mineras. Los Vecinos Autoconvocados de Andalgalá trabajan para impedir la explotación de un nuevo yacimiento, Agua Rica, en el nacimiento de las cuencas de los ríos que abastecen de agua potable a la población.

“’Los pueblos deben estar siempre atentos a la conservación de sus intereses y derechos y no deben fiar más que de sí mismos. El extranjero no viene a nuestro país a trabajar en nuestro bien, sino a sacar cuantas ventajas pueda proporcionarse’. Mariano Moreno”. Esta frase, escrita a mano y rodeada de banderas argentinas, se leía en el salón donde se realizó el Encuentro sobre Minería, Derechos Humanos y Ambiente, en la localidad de Andalgalá, provincia de Catamarca, los días 27 y 28 de septiembre pasados. Allí está asentado el primer yacimiento minero de extracción de oro y cobre a cielo abierto de nuestro país: “Bajo La Alumbrera”. La misma empresa, de capitales internacionales, pretende abrir un nuevo y más grande yacimiento, denominado “Agua Rica”, a sólo 17 kilómetros de Andalgalá, que se instalaría en el nacimiento de las cuencas de los ríos que son la fuente de agua potable de la localidad. Los efectos de la contaminación ambiental, la disgregación social, las promesas de trabajo y progreso incumplidas y el saqueo que actualmente permiten las leyes mineras, llevaron a los vecinos de Andalgalá a informarse, para conocer las verdaderas condiciones en que trabaja la minera y el perjuicio que está ocasionando a su población.

En el marco de este trabajo, organizaron el Encuentro, del que participaron legisladores, expositores y representantes de comunidades afectadas por la minería de diversos lugares del país. Durante los días 27 y 28 de septiembre, el salón de la parroquia San Francisco de Asís se colmó de vecinos, concejales, diputados, maestros, periodistas y representantes de instituciones, interesados en la problemática minera. Dos grandes parlantes instalados en la vereda permitían que también los que pasaban por la calle escucharan las ponencias de los expositores. Aquellos que no pudieron acercarse al lugar tuvieron la posibilidad de seguir el Encuentro a través de una FM local que realizó una transmisión permanente en vivo.

El Encuentro fue inaugurado con una representación teatral de un grupo juvenil local, y los temas centrales abordados fueron: la contaminación ambiental, el saqueo de las riquezas, el agotamiento de recursos no renovables a manos de empresas extranjeras, los derechos humanos vulnerados por la gran minería, la necesidad de acceder a la información sobre el accionar de las empresas mineras y las experiencias relatadas por vecinos y técnicos de otros lugares del país y Latinoamérica que conocen las consecuencias de la minería. Una de las expositoras fue la diputada nacional Marta Maffei, quien detalló las enormes ventajas que la legislación actual otorga a las mineras, como las exenciones del pago de IVA, del impuesto a los combustibles y al cheque, el no pago de retención a las exportaciones, la imposibilidad de modificar el régimen tributario especial para estas empresas durante 30 años, y los reintegros que el Estado les otorga, los cuales superan el monto de las exiguas regalías que las mineras dejan al país, y por lo cual la Nación termina pagando para que se lleven las riquezas extraídas. Maffei explicó que la política minera forma parte de una avanzada del poder económico extranjero, encabezada por el Banco Mundial, sobre los recursos naturales de América Latina.

Un claro ejemplo de esta situación lo dio la Ingeniera Química Claudia Carcamo, integrante de ASONOG, una red de organizaciones de Honduras, quien contó la experiencia de su país con los emprendimientos mineros. Carcamo relató que allí también la legislación es sumamente beneficiosa para las empresas y que la población está siendo afectada por los daños ambientales, sociales y económicos. El 33% del territorio hondureño se encuentra concesionado para la explotación minera, y han intentado avanzar incluso en zonas que son Reserva Biológica.

El Ingeniero Héctor Nieva abordó los aspectos técnicos de la contaminación ambiental provocada por La Alumbrera, que afecta de manera directa a tres provincias: Catamarca, Tucumán y Santiago del Estero. Esto se debe a que el material extraído, con restos de cianuro y otros químicos, es mezclado con agua –se consumen miles de litros para esto- y llevado a través de un mineraloducto (un entubado de 340 kilómetros) hacia Tucumán, donde se realiza el secado. Los líquidos desperdiciados y ya contaminados son vertidos en el Río Salí, que corre hacia las Termas de Río Hondo; desde allí continúan corriendo a través del Río Dulce, que desemboca en la laguna de Mar Chiquita. Mientras, el oro y cobre son llevados en contenedores rumbo al puerto de Rosario, para ser exportados.

Un gran peligro, denunciado por varios expositores, lo constituye el drenaje ácido que provoca la literal montaña de escombros que genera la extracción minera: el resto de rocas que no son utilizadas se van apilando, y el azufre de las rocas pulverizadas que han sido tratadas con cianuro -al entrar en contacto con el oxígeno del aire o del agua- genera ácido sulfúrico. Este ácido disuelve las rocas y arrastra los metales pesados, filtrándolos hacia las napas subterráneas, acumulándolos en la vegetación, en los animales, con el riesgo de que pasen también al hombre. Los daños provocados por el contacto con metales pesados son irreparables. La Alumbrera no ha colocado ningún tipo de membrana que proteja el suelo de filtraciones, con el agravante que ha asentado la pila de escombros sobre una falla geológica, en una zona sísmica.

Todos estos daños se vuelven más amenazantes de cara a la explotación del yacimiento “Agua Rica”, de mayores dimensiones que La Alumbrera, al cual los vecinos han decidido rechazar de manera categórica.

El Encuentro se enriqueció con las exposiciones de las comunidades afectadas por la minería en Argentina. Comenzaron los Vecinos de Andalgalá, a través de los profesores Marcelo Orellana, Graciela Chayle de Fernández y Juan Mansilla, quienes relataron la historia de la minería en la región y los daños que actualmente padecen. Dante Flores explicó la realidad de Choya, un pueblo andalgalense. Marcos Pastrana, representante de la Comunidad Indígena de Tafí del Valle, abordó el tema de Derecho Indígena y Recursos Naturales y contó cómo está siendo dañada la provincia de Tucumán; el Ingeniero Jorge Ragno explicó la situación de Termas de Río Hondo, en Santiago del Estero; los Vecinos Autoconvocados de San Juan contaron la problemática que vive su provincia debido a la explotación de los yacimientos Veladero y Pascua Lama por la empresa Barrick Gold; y Liliana Villerio y Mirta Galíndez, representantes de la comunidad de Sierra Colorada, relataron la manera en que los vecinos de esa localidad de la estepa rionegrina, acompañados por el gobierno municipal, se están informando e intentando frenar el avance minero, ya que han recibido varias órdenes de cateo, en una zona fundamentalmente ganadera cuya importante certificación de calidad orgánica se perdería en caso de iniciarse trabajos de exploración y explotación minera.

Los abogados Víctor Ricco, Sofía Bordenave y Mariela Pereyra, del Centro de Derechos Humanos y Ambiente, expusieron sobre Derecho a la Información, Derechos Humanos vulnerados por la minería y las alternativas jurídicas que existen para enfrentar el avance de las empresas.

Andalgalá es zona de membrillos, de viñas, de cabras. Forma parte de los Valles Calchaquíes, aunque la falta de caminos adecuados la margina de los recorridos turísticos tradicionales. Pueblo de una gran belleza y potencial agrícola ganadero, que está siendo condenado a la pobreza y la desaparición, en tanto se agotan y contaminan sus fuentes de agua, se arruina su suelo y se devasta su naturaleza. Pueblo hospitalario y solidario, que está siendo dividido por los intereses de los grandes capitales extranjeros.

En Andalgalá, los vecinos se organizaron y levantaron su voz. Como integrantes de la Red de Comunidades Afectadas por la Minería en Argentina participan de acciones en otras provincias, defendiendo con valor y dignidad “sus intereses y sus derechos”, como se leía en la frase elegida por ellos mismos. Sobre todo, el derecho a oponerse a aquellos que, con el único fin de enriquecerse, pretenden impedirles vivir en el lugar elegido.



Fuente:

Vecinos Autoconvocados de Andalgalá - ditosalas@yahoo.com.ar

Área de Comunicación - Centro de Derechos Humanos y Ambiente - Patagonia - mariana@cedha.org.ar

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