Kirchner envía misión a Coronda para salvarle las papas al PJ local y su candidato Rosatti
Por Reenvío El Ciudadano - Thursday, Apr. 21, 2005 at 8:50 PM

SOS KIRCHNER. El presidente sale a “auxiliar” a Obeid en el marco de la crisis carcelaria

La Nación envía una misión a Coronda

Un equipo interdisciplinario llega entre hoy y mañana para evaluar la situación
El presidente Kirchner y el ministro Rosatti, acordaron la formación de la comisión.
Una comisión interdisciplinaria llegará a la provincia entre hoy y mañana para analizar la masacre de la semana pasada en la cárcel de Coronda, donde 14 presos fueron asesinados, y ronda el fantasma amenazante de la venganza. Nadie parece sentirse seguro en Coronda: ni los agentes del Servicio Penitenciario ni los presos. Llevar paz al penal y romper el grueso tejido que envuelve esta historia de horror y muerte parece utópico, ya que nadie tiene las garantías suficientes para decir su verdad.
En ese marco, el presidente Néstor Kirchner le solicitó ayer al ministro de Justicia, el santafesino Horacio Rosatti, el armado inmediato de una comisión nacional multidisciplinaria a fin de estudiar los hechos ocurridos en Coronda. Según pudo saberse, desde el gobierno nacional existe cierto malestar al entender que en Santa Fe “los funcionarios están minimizando los hechos ocurridos”.
“La comisión fue creada para auxiliar a la provincia (por Santa Fe), no es de ninguna manera una intervención”, dijo ayer una fuente del Ministerio de Justicia de la Nación.
Los motivos que mueven a Kirchner a intervenir en este conflicto no son pocos. Acaso uno de ellos sea la necesidad de que la situación carcelaria no le genere costos al peronismo santafesino en las elecciones legislativas de este año, para cuando ya es un secreto a voces que quien encabezará las listas oficialistas será, justamente, el ministro Rosatti. También juega la cantidad de muertes que se producen en la Argentina a manos del Estado, ya sea en episodios de gatillo fácil, como en el interior de los penales. Y este es un estigma con el que no quiere cargar Kirchner, que ha hecho de la defensa de los derechos humanos una de las principales banderas de su gobierno.
La comisión nacional que monitoreará la situación de la cárcel de Coronda se conformó con funcionarios de distintas áreas del gobierno nacional, entre las que se encuentran la Secretaría de Derechos Humanos, el Servicio Penitenciario Federal, el Programa Nacional de Trabajos en Cárceles, la Subsecretaría de Política Criminal y el Ministerio de Justicia. Y la persona que estará a cargo de esta comisión es Raúl Jonás, quien se desempeña como secretario de Asuntos Penitenciarios de la Nación y que acompañó a Horacio Rosatti cuando fue intendente de Santa Fe, desempeñándose como secretario de Asuntos Hídricos de ese municipio.
Desde el Ministerio de Justicia de la Nación aseguraron que la tarea encargada a este equipo de funcionarios es la de confeccionar una serie de informes y asesorar al gobierno de Jorge Obeid sobre los pasos a seguir, tanto para esclarecer lo ocurrido como para tomar medidas de acción en el futuro. Este asesoramiento técnico del gobierno nacional se complementa con la ayuda económica ya brindada a Santa Fe para obras carcelarias. Hasta principios de este año se habían transferido, solo desde el Ministerio de Justicia, veinte millones de pesos para la construcción de tres nuevas alcaidías y la próxima semana se realizará la apertura de sobres a fin de adjudicar las obras para la construcción de la cárcel federal de Coronda.

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AGENTES DEL SP PIDEN “MAYORES GARANTÍAS” PARA EJERCER SUS TAREAS

Los guardiacárceles pegaron el faltazo
Los agentes del Servicio Penitenciario que presenciaron el sangriento motín del penal de Coronda, que terminó con el asesinato de 14 presos, comenzaron a exhibir secuelas de tipo psicológico, al punto que ayer 22 de ellos no se presentaron al relevo de guardia asignado, mientras que otro grupo pidió “mayores garantías” para ejercer sus tareas, informaron voceros carcelarios y legislativos.
Esta situación fue dada a conocer por el director de la unidad penitenciaria, Carlos Monti, y el presidente de la comisión de Derechos y Garantías de la Cámara de Diputados provincial, Raúl Lamberto (PS), quien recorrió el penal y dialogó con delegados de los pabellones.
Monti confirmó que “hay personal que faltó; argumentaron problemas médicos, por lo que van a ser examinados por un profesional”. El funcionario aludió a varios de los 22 guardiacárceles que ayer no se presentaron a las 8 al relevo de guardia. Varios de ellos, la mayoría de poco más de 20 años, presentaron certificados médicos por situaciones de estrés. En tanto, otros guardiacárceles se reunieron con las autoridades de la cárcel para reclamar “mayores garantías” para ejercer sus tareas, tras lo cual retornaron a la guardia.
Al respecto, Lamberto explicó que “algunos agentes del Servicio Penitenciario se encuentran afectados psicológicamente, y, al igual que varios internos, requirieron atención”.
“Son jovencitos de 20 ó 21 años, que al igual que muchos de los internos necesitan atención por las situaciones de extremo riesgo y violencia que soportaron”, agregó el legislador socialista.
Voceros del SP señalaron que el gobierno provincial solicitó asistencia al gobierno nacional, específicamente de profesionales del Servicio Penitenciario Federal y de la Secretaría de Derechos Humanos, que entre hoy y mañana llegarán a Coronda para colaborar (ver aparte).
Monti admitió tras la reunión con los guardiacárceles que “el temor y la desconfianza están inmersos tanto en la población penal como en el personal carcelario”.
En ese sentido, los agentes pidieron medidas de seguridad en algunos sectores, que se efectivizaron mediante cambios de pabellón de algunos internos y el refuerzo de las guardias, según voceros del Ejecutivo provincial. Además, los carceleros explicaron que el acostumbrado régimen de 24 horas de servicio por 48 de franco fue reemplazado en los últimos días por uno de 36 por 36 debido a los acontecimientos ocurridos el día de la revuelta y sus derivaciones.
El faltazo comenzó a efectivizarse ayer a las 8, cuando 22 de los 41 guardiacárceles que debían relevar a sus compañeros en la guardia no se presentó a trabajar. Al parecer, la mayoría de ellos son los que trabajaron el domingo pasado en ocasión de la visita de los familiares de presos rosarinos y muchos de los cuales presenciaron la masacre.
Varios guardiacárceles reconocieron ayer tener miedo en la cárcel de Corona ya que “ahora se trabaja bajo otras circunstancias”.
Por su parte, la madre de uno de los dos agentes del Servicio Penitenciario que estuvo como rehén el lunes 11 de abril reconoció que su hijo “está pasando por una crisis gravísima: llora todo el día y no quiere saber nada con volver a trabajar”.

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