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GUSANOS EN LA PIEL
Por reenvío agencia walsh -
Wednesday, Feb. 22, 2006 at 12:01 PM
SE DETECTARON VARIOS CASOS EN EL HOSPITAL DE NIÑOS GUSANOS EN LA PIEL: INFECCIÓN QUE AUMENTÓ SENSIBLEMENTE
La patología se llama miasis. Se produce cuando las moscas ponen larvas en heridas causadas por el rascado de la piel. Se presenta en situaciones de falta de higiene personal y doméstica. El tratamiento es complicado y doloroso
El calor trae consecuencias insospechadas. Cuando las condiciones sociales o de habitabilidad no son las mejores, los peligros aumentan. El Hospital de Niños de nuestra ciudad presenta este verano un llamativo registro de miasis, enfermedad vinculada directamente con la falta de higiene y condiciones dignas de vida.
“Con el calor todo tiende a infectarse más rápido”, explica Gloria Portillo, una de las jefas de guardia del principal centro pediátrico de la provincia. Las altas temperaturas, la falta de cuidados, y la imposibilidad de contar con una infraestructura que facilite la higiene, conforman un cóctel muy perjudicial.
La miasis en particular es un emergente de esa situación. Es ni más ni menos que la proliferación de gusanos en el cuerpo. Ocurre cuando el moscardón pone sus huevos en heridas de la piel, generalmente producidas por el rascado de picaduras.
El proceso es siempre el mismo. “Los chicos se rascan las picaduras de mosquitos o de piojos, se producen una herida, llega el moscardón y en un instante pone larvas. Al poco tiempo, no más de dos o tres días, empiezan a sentir fuertes dolores”, relata Portillo.
Es muy común que este proceso se produzca dentro del oído, lo que lo hace aún más molesto. Al profundo dolor, los chicos suman un zumbido, mareos y pérdida del equilibrio.
Muchos casos
“Este año lo vimos mucho. Personalmente, en mi guardia de los días jueves, lo vi más que en otras ocasiones. Hubo un tiempo que lo dejamos de ver, pero ahora es muy común que lleguen chicos con miasis o con infecciones en las piernas producidas también por la contaminación de la piel después del rascado por la picadura de distintos insectos”, explica Portillo.
Aunque con la premisa de no estigmatizar a las víctimas, la médica hace su propia descripción de la escena donde la enfermedad se desarrolla. “Se produce en lugares donde no es común el lavado diario del pelo, y menos común que duerman sin moscas. Enseguida el insecto pone los huevos en la cabeza o en alguna herida, y el gusano crece”.
El tratamiento es bastante complicado. “Con pinzas sacamos los gusanos uno por uno. A veces son cientos, en diferentes agujeros. Si no los sacáramos, crecerían y consumirían el líquido presente bajo la piel”.
Los síntomas los hace explícito el paciente, pero muchas veces es tarde. Cuando es consecuencia de la pediculosis, empiezan a sentir algo que les molesta dentro de la cabeza, y en el oído genera ruido, “porque los gusanos hacen burbujitas. El chico se queja de todo”, concluye Portillo.