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Dramática carta de un detenido PVVS
Por ((iSdE)) -
Tuesday, Oct. 23, 2007 at 10:34 PM
Un interno penado pide ayuda por su situación de inmuno comprometido
El Colectivo Santiago del Estero de Indymedia Argentina ha recibido una dramática carta de una persona privada de libertad que está alojado en la sala 10 del Hospital Independencia, en la que pide su publicación en todos los medios de comunicación independientes explicando su situación. A continuación la damos a conocer:
“Santiago del Estero, 23 de Octubre de 2007.-
A todos los medios masivos de comunicación y/o
Autoridades Competentes:
El que suscribe, Raúl Francisco Molina, interno penado, pone en conocimiento a través de los Medios de Comunicación Independientes y para que se enteren las Autoridades Nacionales e Internacionales en la defensa de los Derechos Humanos de las PVVS (Personas viviendo con VIH/SIDA) e Intramuros.
Lamentablemente en el Penal de Varones de Santiago del Estero ni la infraestructura del lugar ni el personal, tanto de Salud, como guardiacárceles, son idóneos ni adecuados para tratar a una persona con serología positiva y lo digo con conocimiento y sufrimiento de la situación, ya que estoy detenido desde el 2003. En tres años de detención, (digo tres porque hace un año que estoy en la sala 10 del Hospital Independencia de esta provincia porque después de pasar por cuadros de tuberculosis, sarnas, herpes y otras enfermedades menores, debía pedir los medicamentos retrovirales con un tiempo prolongado, ya que no me los suministraban a horario, agregándole problemas del tipo que en la cárcel, la última comida del día se da a las 18,30, mientras que mi ingesta del cóctel es a las 20,30 hs. Entonces les preguntaba a los Directores penitenciarios si no tenía derecho a una comida caliente, ya que debía tomar la medicación con el estómago lleno. También tuve problemas con conseguir vitaminas recetadas por médicos de cabecera que nunca me las dieron, así como tratamientos de enfermedades oportunistas que dejaron avanzar por demoras en mis traslados a los centros de asistencia, a veces de semanas, tanto de visita a mi médica infectóloga o a mi terapia familiar. Psicológicamente, estar viviendo un año en una sala de un Hospital es deprimente, no sólo por la situación que uno pasa sino por el entorno de angustia y dolor que uno ve.
Sin embargo tampoco volver al Penal me conviene porque a las Autoridades Provinciales les hice notar que en tres años el Servicio Penitenciario de Santiago del Estero no cumple con las normas de bioseguridad que establece la Ley Nacional de Sida, Nº 23.798/93.
Volviendo a mi situación como PVVS, me trajeron a este Hospital con una Carga Viral de 388.324 copias y un CD4 de 193, actualmente estoy sin tratamiento por las diversas resistencias que ha hecho el virus con diferentes cócteles, y estoy pidiendo junto con mi médica infectóloga un traslado al Hospital Fernández de Buenos Aires para que me encuentren un tratamiento con la adherencia necesaria que necesita mi salud.
A todos los medios independientes del mundo estoy pidiendo ayuda para no morirme en la sala 10, que tampoco cumple con las medidas de bio seguridad para inmunocomprometidos, habiéndome contagiado ya varias veces enfermedades oportunistas, porque creo que tengo derecho a un tratamiento, pues así lo dice la Constitución Nacional, y el derecho a la vida que tengo por mandato divino, y que personas poco coherentes y con mucha desidia e incompetencia en el tema VIH/SIDA, por cuestiones burocráticas, retardan mi posible tratamiento en la ciudad de Buenos Aires y los hago responsables si mi salud se deteriorara tanto que fuera irreversible”.