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Reparar la deuda con los Pueblos Originarios
Por Fuente: Silvia Vázquez / FORJA -
Monday, May. 17, 2010 at 10:30 PM
svazquez@diputados.gov.ar
Columna de la diputada nac. en el diario El Argentino, 16/05/2010
Diecisiete millones de hectáreas en posesión del extranjero y entre 6 y 7 millones en litigio, demuestran que el despojo histórico del Estado y de los que se convirtieron en terratenientes, hacia los pueblos originarios argentinos, no ha sido reparado.
La preexistencia de los pueblos originarios, reconocida por la reforma constitucional del 94, nos obliga a los legisladores a tomar partido, dictando leyes que hagan operativas las mandas de orden constitucional. Por eso presenté el proyecto de ley de Reparación Histórica de los Pueblos Originarios Argentinos, convencida de la necesidad de iniciar el debate sobre el respeto a los derechos de aquellos quienes son los más pobres y excluidos de nuestro país. Necesitamos, con urgencia, reparar el daño cometido desde el Estado contra los pueblos indígenas, avanzando legislativamente con normas que pongan fin al genocidio y despojo perpetrados.
Tengo la profunda convicción de que, a días de festejar el Bicentenario, la comunidad indígena organizada contará con el consenso y el apoyo de las distintas fuerzas políticas del país en la discusión y sanción de esta ley, que nos coloca en un lugar distinto respecto del primer centenario. A diferencia de vísperas de 1910, el 2010 nos exige transitar otro camino, de reconocimiento de la diversidad cultural y étnica.
Los puntos fundamentales del proyecto son: la modificación del código civil, incorporando a los pueblos originarios como personas jurídicas de carácter público; la propiedad comunitaria de la tierra; la reparación cultural, sumando al registro nacional de las personas los nombres y apellidos indígenas; y el fomento del desarrollo económico y social mediante la efectiva aplicación de políticas públicas por parte del Estado.
No cabe duda alguna de que el conflicto central a resolver es el de la propiedad de la tierra. Lo demuestran los 70 conflictos entre indígenas y terratenientes a lo largo y ancho del país. Por ello, hemos presentado también un proyecto de ley que, de ser aprobado por mayoría calificada, otorgaría carácter constitucional al convenio 169 de la OIT, que reconoce –una vez más– la preexistencia de los pueblos originarios. Y por lo tanto su derecho a la propiedad de las tierras que ocuparon ancestralmente y de las que fueron expulsados por la fuerza.
En ese sentido, resultó cuanto menos paradójico que, en medio del reclamo de los embajadores europeos por posibles restricciones a la importación de productos, los pueblos originarios solicitaban al parlamento la aprobación de leyes para su reconocimiento. Fue en una conferencia de prensa realizada en propio congreso, a pocos metros del enjambre de periodistas que pujaban por entrevistar a los embajadores. Estos embajadores europeos escucharon nuevamente el reclamo argentino de soberanía sobre las islas Malvinas. Reclamo que no hace otra cosa que ratificar los legítimos derechos de los primeros pobladores a su tierra.
Como los malvinenses, usurpadores de los verdaderos pobladores –que fueron indígenas –los terratenientes locales esgrimen ilegítimos títulos de propiedad, que encubren la violencia de su origen. Argentina legitimará aún mas su reclamo sobre Malvinas, si primero reconoce su propia deuda con quienes han sido expropiados puertas adentro.
No es tiempo para neutrales. O se está con los derechos humanos, o se está, desde la acción o la inacción, permitiendo que continúe el despojo.
Las comunidades aborígenes no quieren revancha. Quieren vivir como lo hicieron toda su vida, en comunión con la naturaleza. Y nosotros somos parte de esa naturaleza con la cual ellos quieren vivir en armonía. Aún con todo el daño que nuestra civilización está haciendo al medioambiente. Cuánto tenemos para aprender de ellos.
Silvia Vázquez
Diputada Nacional
Presidenta del Partido de la Concertación-Forja.