Julio López
está desaparecido
hace 6430 días
versión para imprimir - envía este articulo por e-mail

Primera medida de Macri fue aumentar el boleto del subte
Por Fuente: Argenpress - Tuesday, Jan. 10, 2012 at 5:04 AM

lunes 9 de enero de 2012

Emilio Marín (LA ARENA)

Desde noviembre el gobierno nacional y el porteño discutieron el traspaso del Subte. Al día siguiente de firmar el preacuerdo, Mauricio Macri decidió aumentar 127 por ciento el boleto.

A comienzos de noviembre, el gobierno nacional propuso a la administración porteña que se hiciera cargo del Subte y Premetro.

El secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, la presentó como muy conveniente para la Ciudad: se le transferían esos servicios para vitalizar la autonomía porteña y los activos resultantes de las obras realizadas por la Nación desde 2003, y en las líneas A y E, que suman miles de millones de pesos. Completando el paquete, se mantenía la mitad de subsidio anual pagado a la concesionaria Metrovías, por 360 millones de pesos, sólo por 2012. La otra mitad debía aportarla Mauricio Macri.

Schiavi no tuvo éxito en las primeras reuniones con la vicejefa María Eugenia Vidal, el secretario de Hacienda Néstor Grindetti y el de Desarrollo Urbano Daniel Chain. Un poco extraño, porque el actual secretario de Transporte fue muy allegado al macrismo. En 2003 fue su jefe de campaña para las elecciones a la jefatura de gobierno, perdidas en segunda vuelta ante Aníbal Ibarra. Ese antecedente amistoso no sirvió de nada: sus viejos amigos del PRO resistían el traspaso.

Esa negativa argumentaba que el operativo venía demorado ocho años y no se podía resolver en un mes ni dos. El funcionario nacional apremiaba con que la transferencia se hiciera el 1 de diciembre, de máxima, y bajo cuerda deslizaba que sería aceptable el 1 de enero de 2012. La Ciudad pretextaba que quería ver el contrato con la concesionaria, firmado por la Nación en 1993 y al que aún le restan cinco años de vigencia.

Esos argumentos tenían su razonabilidad, pero en realidad ocultaban otras causas de peso, o de pesos, en la actitud refractaria del gobierno porteño.

En primer lugar aquél no quería poner la mitad del subsidio, 360 millones de pesos. Esto fue muy evidente cuando la tríada Vidal-Grindetti-Chain pidió que el subsidio nacional siguiera en pie hasta 2017. Le contestaron con la negativa. A la administración nacional tampoco le sobra la plata, aunque lo disimule con mucha propaganda de que en 2011 los ingresos tributarios aumentaron el 30 por ciento. Cristina también está ajustando...

La otra razón del esquive es que Macri pedía que el PEN avalara con fondos del Anses los créditos millonarios que debía tramitar para nuevas obras del Subte y modernización de la flota. Se deslizó la suma de mil millones de dólares en créditos, de los que la mitad debía avalar el gobierno nacional. Otro nones.

Llegado a ese tope de desacuerdos, pareció que el traspaso correría la misma suerte de intentos anteriores. Sin embargo, por abajo los funcionarios de uno y otro equipo seguían negociando. Cosa rara y buena a la vez, en esos contertulios no habían dado participación a Metrovías, que habitualmente era el rey de ese lugar. La presidenta, en uno de sus últimos discursos antes de sacar el pie del acelerador y encarar hacia el Hospital Austral, reclamó a Macri "un esfuercito" para que se hiciera cargo del Subte. Y el 2 de enero se supo que se fumaría la pipa de la paz. Ahora se verá quién fumó a quién.

Primero tarifazo

Cuando la negociación estuvo trabada, en general perdía posiciones el jefe del PRO. Hasta Schiavi, su viejo amigo, lo chicaneaba recordando los años que se la pasó mandando notas a Balcarce 50 reclamando la transferencia del Subte, como parte integrante de la autonomía, infructuosamente. ¿Y ahora que les ofrecían el traspaso, no lo aceptaba?

El contrato con Metrovías fue relativizado por Chain, quien recordó que la Nación podía perfectamente nombrar a la Ciudad para controlar el cumplimiento. Metrovías no debía meterse, aclaró; había un acuerdo entre dos gobiernos.

En cuanto a la pretensión de la vicejefa Vidal de que las cosas se hicieran prolijas para que del Subte no resultara un asunto tan vidrioso como Aerolíneas, la respuesta le llegó de Daniel Filmus. Este le recordó que el gobierno de su jefe estaba en grave falta con el control de las obras en construcción, derrumbes de por medio como el de calle Bartolomé Mitre.

El otro temor del gobierno de la Ciudad, no declarado por razones obvias, puede haber sido la existencia de un gremio combativo en los rieles bajo tierra. La Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro dirigida por Beto Piannelli y Norberto Segovia consiguió la simple inscripción gremial en 2010, luego de años de reclamos. Y es un hueso duro de roer para Metrovías y para Macri si éste tomaba el control del servicio.

En el balance de los pros y contras, al final el jefe del PRO aceptó el convite. El 3 de enero se firmó el Acta-Acuerdo entre el ministro Julio de Vido y el propio Macri, estando previsto que en tres meses se arreglen los detalles administrativos y legales.

Pero al día siguiente, sin perder ni un minuto, el gobierno receptor emitió un comunicado dando cuenta del aumento del precio del boleto de Subte. Pasó de $1.10 a $2.50, una suba del 127 por ciento. A Grindetti le tocó la poco feliz tarea de dar cuenta de la novedad, que afecta al 1.2 millón de usuarios. De éstos son amplia mayoría los que viajan por ese medio a sus trabajos, según las investigaciones de la concesionaria.

El gobierno de Cristina ha hecho el negocio de los pelones, expresión cuyana que significa que sacó la peor parte. Tal como pinta la cosa, los Macri boy´s le enroscaron la víbora al ex Macri boy, Schiavi. Es que el funcionario nacional había informado que las dos administraciones ponían cada una la mitad de subsidio anual: 360 millones de pesos. Y advirtió que si había aumentos de tarifas que llevaran a la disminución de esos subsidios, la parte sobrante de éstos se aplicaría a obras.

Pero los del PRO lo pasaron por arriba: aumentaron la tarifa en forma instantánea con el Acta-Acuerdo y con ese dinero consideran puesta su parte. No aportarán de sus arcas comunales los 360 millones. Esa plata la entregarán todos los usuarios. Un negoción. Allí está la clave de porqué los macristas terminaron aceptando el traspaso casi como un regalo de fin de año.

Flojito el PEN

El gobierno nacional está a tiempo de obligar a la administración porteña a respetar los compromisos, en lo tocante al subsidio de ambas partes y otras cláusulas a negociar en estos tres meses. ¿Lo harán Schiavi, De Vido y Hernán Lorenzino?

Los macristas han actuado a la ofensiva, porque saben que la otra parte arrastra una debilidad política y financiera: el PEN quiere achicar gastos, recortar subsidios y quiere desprenderse sí o sí del Subte. En esa situación, los del PRO consideran que pueden imponerle algunas condiciones extras, como esta gambeta a su aporte por la mitad del subsidio.

Al disponer en forme urgente tan abusivo aumento del boleto, sin audiencia pública, las autoridades de la Ciudad pueden haber pensado que así dejaban "pegada" a la Casa Rosada. En todo caso se pagarán los costos políticos a medias, pensaron en el PRO.

Los aumentos de tarifas de servicios públicos pueden ser moneda corriente en 2012, luego que el PEN tomara la decisión de recortar o eliminar subsidios, según los casos. En estas "actualizaciones" de boletos de colectivos, de tren, de luz, agua y gas, impuestos, etc, lo del Subte se mimetizará en parte.

El gabinete de Cristina Fernández tenía tres opciones y eligió la peor.

La mejor era reestatizar un servicio público esencial como el Subterráneos de Buenos Aires, empleado por 1.2 millones de usuarios cada día, mejorando las condiciones del servicio, ampliándolo a otros rincones de la Ciudad y respetando las condiciones de trabajo de los empleados. Así ocurre en otras ciudades importantes del mundo donde el subte y el tren son estatales. Se podría haber aprovechado la última cita del G-20 en Cannes para averiguar sobre esta alternativa, la mejor.

La otra opción era seguir hasta 2017 como hasta ahora, subsidiando con 720 millones de pesos a Metrovías o negociando una baja de esta suma con el argumento de que la Nación está ajustando el gasto público.

La tercera alternativa era la peor y fue la elegida: transferir las obras y el control del servicio a Macri, manteniendo la mitad del subsidio nacional. Era una invitación evidente al aumento de tarifas, no una sino varias, y a que el ingeniero comience a atacar las condiciones de trabajo del Subte. Lo peor es que el jefe del PRO tomará de antecedentes las críticas de la presidenta a la "tendinitis" de los trabajadores. Ni uno ni otra acusaron de nada a los popes de Metrovías, del grupo monopolista Roggio, aunque éstos pueden haber adquirido aquella rara enfermedad de los tendones, de tanto contar plata de subsidios.

agrega un comentario


todos contra el bigote
Por roxckero - Tuesday, Jan. 10, 2012 at 10:23 AM




sí lo anunció la Academia española de Cine. Algo por detrás de las películas de Almodóvar, se viene el estalido !

agrega un comentario


por Koba! la constitucion dice..
Por Captain Lincoln F. Sternn - Tuesday, Jan. 10, 2012 at 12:30 PM

la constitucion dice que no puede haber traspaso de competencias sin las respectivas partidas presupuestarias, como defender a Macri no es trendy y a mi me gusta estar a la moda, me limitare a señalar esta practica bananera de este gobierno bananero de limpiarse el culo con la constitucion y pasarle, principalmente a la municipalidad de buenos aires, hospitales, subtes, escuelas etc sin las partidas correspondientes con el objeto de transformar a la ciudad en una suerte de mendicante de coparticipacion central, al igual que el resto de las provincias...practica consecuente con el espiritu centralista unitario de nuestros politicos tropicales y que ya viene cosechando "exitos" desde la decada del 30 (como cualquiera puede comprobar revisando la involucion de las economias provinciales, principalmente de las mas pobres, desde la fecha)

agrega un comentario


gracias trotskoides del 64%
Por triunvirato rojo - Wednesday, Jan. 11, 2012 at 6:33 PM

En primer lugar debemos dar gracias al internacionalismo de cuarta que se dedico, en la campaña a jefe de gobierno, a denigrar a Filmus teniendo el podio el MXT donde lo comparo con Shoklender, Macri fue puesto como una carmelita descalza por dicha campaña
En segundo lugar debemos dar las gracias al POPO que viene acusando a Filmus de sionista, obviamente Macri parecia un luchador palestino con dicha campaña del POPO, los fachos contentos por saber que Filmus era un agente de los sabios de sion. Eso si, los dias en que triunfo Macri y el dia en que asesinaron a Kadafi, en los locales del PRO, la EMBAJADA DE ISRAEL y en los locales de I.S. mienbros del FIT habran descorchado CHAMPAGNE a mas no poder.
Gracias a todos los trotskoides de cuarta por el 64% de mauricio.
Ya MACRI dio muestras de despreciar a la clase obrera: 2500 cesanteados apenas asumio, destruccion de los hospitales publicos, majoramiento de las plazas mediante sobreprecios, baja calidad de las viandas en las escuelas.Eso es poco comparado con esto: bandas paramilitares de la UCEP, bandas de civiles armados en el indoamericano.
Durante la campaña el enemigo principal de la clase obrera para el FIT y PROYECTO SUR-MXT fue la burocracia sindical y el tibio nacionalismo de Cristina con su candidato el pelotudo de Filmus.

FIT, PROYECTO SUR- MXT: 64% el PRO, aumento del subte y Miguel del Sel futuro presidente de todos los argentinos, sigan asi que la revolucion les va a pasar de largo

agrega un comentario