“En todos estos años de democracia, la policía sigue ejerciendo prácticas de la dictadura'
Por Red Eco Alternativo - Monday, Nov. 24, 2014 at 9:36 AM

Jueves 20 de Noviembre de 2014 | Lo afirmó la abogada Marina Schifrin en diálogo con el programa La Palangana de Radio Universidad Calf. La letrada fue agredida la semana pasada en su estudio jurídico por un hombre que la golpeó y se llevó un pendrive con información. Este ataque se produjo poco después de que se conocieran avances en la causa por la Masacre de Bariloche, en la que en junio de 2010 la policía local mató a Diego Bonefoi, Nicolás Carrasco y Sergio Cárdenas, y en la que Schifrin forma parte de la querella. Red Eco Alternativo

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(Red Eco) Río Negro – “Yo tengo varias causas donde se defienden a los derechos humanos violados por las fuerzas de la represión, por la policía, pero ahora particularmente estoy trabajando en la causa de Cárdenas-Carrasco, que es la causa de las muertes del 17 de junio de 2010. Soy querellante por la familia de Nicolás Carrasco, el adolescente de 16 años que fue muerto en la represión y justamente esa causa se estuvo moviendo en estos días, con medidas importantes que a mí me costó mucho conseguir, tuve que llegar hasta el Superior Tribunal de Justicia con recursos para conseguirlas. Por eso pienso que este atentado que me hicieron, esta especie de atentado, está vinculado a eso”, relató la abogada Marina Schifrin en una entrevista realizada por el programa de radio La Palangana.
El 17 de junio de 2010, el policía Sergio Colombil ejecutó a Diego Bonefoi de 15 años, lo que generó la movilización del pueblo de Bariloche para exigir justicia y una posterior represión por parte de la policía, que dejó a dos jóvenes asesinados, Nicolás Carrasco de 16 años y Sergio Cárdenas de 29, además de decenas de heridos, perseguidos, detenidos, golpeados y torturados. Colombil fue llevado a juicio y condenado a 20 años de cárcel, pero los crímenes de Carrasco y Cárdenas continúan impunes.
En mayo de 2013, Schifrin ingresó en la causa como abogada de la familia Carrasco e inmediatamente comenzó a solicitar distintas medidas. “Hasta el momento hay cinco policías involucrados, lo que sucede es que no teníamos ninguno para Nicolás Carrasco sino para Sergio Cárdenas. Recién empezamos a tener dos involucrados a partir de todos esos pedidos que se empezaron a hacer en instancias superiores, pero nosotros queremos más, porque los policías en una represión ilegal dispararon con escopetas itakas, con balas de plomo pero del tipo perdigones por eso cuesta tanto individualizar qué policías fueron. No es que hay una identidad como cuando es con una 9 milímetros que se puede asociar una bala con un arma, acá como son perdigones de plomo que matan, y así los mataron a los dos muchachos en la represión, no se puede identificar el arma, entonces nos queda una calificación de homicidio en riña, que no nos satisface, pero eso es por la falta de individualización”, afirmó Schifrin.
En octubre de este año, el juez de instrucción Ricardo Calcagno procesó a tres policías (Víctor Darío Pil, Marcos Rubén Epuñan y Víctor Hugo Sobarzo) como “coautores” por el “homicidio en riña” de Sergio Cárdenas. Además, dos comisarios fueron considerados cómplices por ambos crímenes. Sin embargo, se les dictó la falta de mérito a otros siete uniformados que estaban acusados, aunque no fueron sobreseídos de la causa.
“Nosotros sabemos, tenemos muchas pruebas en el expediente, que hubo muchas participaciones necesarias, muchas complicidades, incluso una omisión tan fundamental de la autoridad principal, de los jefes que también están involucrados, entonces nosotros queremos llegar a toda la cadena de responsabilidades y no quedarnos con dos, tres o cuatro que pudieron haber disparado esas itakas, porque fue mucho más, eso fue una represión ilegal organizada de tal manera que directamente no se daban órdenes, se dejaba hacer y así dejaron disparar con balas de plomo. Así que queremos llegar hasta el final, que el conjunto de los responsables no quede impune”, aseveró la abogada a Radio Universidad Calf.
En cuanto al atentado que sufrió el 12 de noviembre pasado, Schifrin especificó: “yo volvía de Tribunales y subí a mi oficina que está en un cuarto piso de un edificio céntrico, cuando voy a abrir la puerta, veo que estaba sin llave y adentro había un hombre, una persona de unos 40 años a cara descubierta. Cuando le pregunté qué hacía ahí, me dice ‘yo estoy esperando a la doctora’, y yo veo que tenía preparada mi notebook para llevársela en un maletín y entonces me di cuenta que se la quería llevar y que no le había interesado ninguna otra cosa porque había dinero, otras cosas de valor importantes y no tomó nada de eso. Le dije que se quedara ahí, no sé cómo me salió, pero el tipo me pegó una piña, yo lo corrí y la cuestión es que al final no se pudo llevar la notebook, pero sí un pendrive que estaba enganchado en la notebook”.
Desde la Gremial de Abogados, organización que Schifrin integra, emitieron un comunicado de solidaridad en el que señalaron: “Se trató de un ataque con total impunidad y una huída al mediodía por el centro de la pequeña ciudad de Bariloche, con Marina en persecución y sin ninguna intervención de fuerzas de seguridad presentes en ese momento (…). Solo ella y su marido poseían llaves del Estudio Jurídico, y el único momento en que se desprendía de las mismas era en las visitas a sus defendidos en las seccionales o lugares de detención donde las llaves quedaban a disposición de las fuerzas de seguridad”.
Respecto a cómo se siente, pasados algunos días de este episodio, Schifrin reflexionó: “la verdad que es difícil protegerse porque todo indica que estamos en democracia, que está vigente la Constitución, pero hay unas prácticas mafiosas por debajo que demuestran otra cosa (…) . La policía en general, en todos estos años de democracia, sigue ejerciendo en su interior las prácticas de la dictadura, pero en la ciudad de San Carlos de Bariloche hay una particularidad que es una ciudad que tiene una desigualdad social mayúscula, es la de mayor desigualdad de la provincia de Río Negro, entonces hay un sector muy pudiente, muy poderoso que brega por seguridad y apoya a la policía con los métodos que sean, y hay un sector muy vulnerable que es el sector de los pobres y en particular de los jóvenes pobres”.
Foto: 8300.web
Contacto: Marina Schifrin 0294-154709881

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Panorama policial
Por reenvío red eco alternativo - Monday, Nov. 24, 2014 at 9:38 AM

La familia de Nicolás Carrasco, asesinado hace tres años y medio en Bariloche, pelea para que la causa no quede impune; en tanto los primeros resultados de las pericias realizadas al cuerpo de César Monsalve desmienten, una vez más, la versión oficial. Nuevas muertes en comisarías y persecución a militantes sociales en Buenos Aires y Córdoba. Red Eco Alternativo
(Red Eco) Argentina - Al sur del país – Nicolás Carrasco tenía 15 años cuando fue asesinado, junto a Sergio Cárdenas de 29, durante la represión con que la policía de Bariloche respondió aquel 17 de junio de 2010 el reclamo de justicia en las calles de la zona de El Alto, luego de conocerse el crimen del adolescente Diego Bonefoi en manos del efectivo Sergio Colombil.
Los asesinatos de Carrasco y Cárdenas permanecen impunes. Carmen Curaqueo, mamá de Nicolás, presentó esta última semana, junto a su abogada Marina Schifrin y referentes de la Multisectorial contra la Represión Policial, un recurso de casación ante la Cámara Segunda del Crimen en el que cuestionan el rechazo de todos los planteos presentados hasta el momento ante el juez de Instrucción Ricardo Calcagno. Afirman que si no se da curso a su pedido, la causa de Carrasco podría quedar impune.
Según explicó la abogada Schifrin, están suficientemente probadas una serie de medidas solicitadas al magistrado, como las escuchas entre uniformados que participaron de la represión del 17 de junio. En este sentido aseguró que tanto la Justicia como la Policía de Río Negro "obstaculiza y no investiga" el crimen.
Por esta causa pasaron ya tres jueces de instrucción. Martín Lozada estuvo durante los primeros 17 meses pero fue apartado y reemplazado por Miguel Gaimaro Pozzi, que permaneció al frente de la causa por cuatro meses hasta que fue designado camarista. Desde marzo del año pasado, quedó a cargo Calcagno. Varios agentes policiales que participaron de la represión están imputados, pero a pesar de que ya fueron indagados hace tiempo, aún no se resolvió su situación procesal.
“Sé que a mi hijo lo mató la policía, no sé qué más quieren, no tenemos respuestas, se siguen burlando de la pérdida que sufrimos", declaró en tanto Curaqueo.
Será ahora la Cámara Segunda del Crimen la que resuelva si acepta o no la recusación presentada por la familia de Nicolás Carrasco.
La lista de casos de jóvenes asesinados por policías en el sur del país es realmente inabarcable. La mayoría de las veces la justicia mete las garras para evitar el avance de la investigación.
César Monsalve tenía 13 años cuando fue visto por última vez el 27 de mayo pasado, al salir de su casa del barrio Oeste en Trelew para dirigirse al barrio INTA al que nunca llegó. Su cuerpo sin vida apareció dos meses después. Las primeras declaraciones oficiales se refirieron a la posibilidad concreta de que el adolescente estuviera drogado al momento de morir, e incluso llegaron a culparlo de su propia muerte.
César era el sobrino de Bruno Monsalve, testigo clave del caso Almonacid, en el que un joven fue abusado en la seccional segunda de Trelew. Bruno fue asesinado, a pesar de que tanto él como su familia, incluido César, se encontraban bajo el programa de protección al testigo.
En los últimos días se conocieron los resultados de las primeras pericias sobre el cuerpo de César. Allí se descartó la presencia de sustancias tóxicas, por lo que la hipótesis oficial queda nula.

La policía sigue pegando y matando
El martes se realizó en Córdoba el II Foro de Derecho Popular, una jornada de debates e intervenciones en el que varias organizaciones denunciaron el recrudecimiento represivo de las fuerzas de seguridad provinciales.
Tras esta actividad, las propias fuerzas se encargaron de confirmar todas las acusaciones recibidas, ya que esa misma noche detuvieron a estudiantes de la Escuela Superior de Bellas Artes Dr. José Figueroa Alcorta que se encontraban haciendo intervenciones callejeras. Además, la Infantería desalojó a vecinos del barrio Bordo y detuvo a integrantes de la Cooperativa de Carreros. Las estudiantes permanecieron detenidas durante prácticamente un día.
La Coordinadora Antirrepresiva por los Derechos Humanos Córdoba emitió un comunicado en el que afirmaron que estas tres acciones represivas impulsadas por la Policía de Córdoba están relacionadas con la urgencia de los grupos económicos GAMA y GNI por desalojar y construir en la zona donde viven los habitantes del Bordo, que resisten desde hace meses el avance de las topadoras: “el accionar represivo se vincula también a los intereses económicos que protege el Gobierno Provincial en manos de De la Sota que reprimirá y frenará cualquier acción de los vecinos organizados por reclamar por sus derechos. Es por eso que detuvieron también la acción organizada de las estudiantes y los carreros”.
En este sentido, la Coordinadora responsabilizó a los grupos económicos, al Ministerio de Seguridad provincial, al mandatario De la Sota, y a la policía e infantería local, por lo sucedido.
En tanto, esta mañana la Comisión de Familiares y Amigos por Justicia por Diego García realizó una conferencia de prensa en la que denunció el caso de este joven de 24 años, que fue detenido el 6 de octubre pasado por una patrulla del Comando de Operaciones Tigre (COT) y alojado en la Comisaría 1° de esa localidad bonaerense donde apareció muerto esa misma medianoche.
Automáticamente la policía dijo que García se había suicidado ahorcándose con su propio pantalón. Sin embargo, no existen pruebas de ello y las pocas fotografías con las que cuenta la causa lo muestran acostado en el piso del calabozo ya sin vida. El primer fiscal que intervino, Mariano Magaz, caratuló la causa como “suicidio” basándose sólo en los dichos de la Policía, mientras tanto el pantalón con el que García se habría ahorcado aún no fue peritado, y su familia vive hostigada en forma permanente por efectivos del COT.
En el marco de la conferencia de prensa, la Comisión de Familiares y Amigos denunció a los funcionarios policiales y judiciales por las irregularidades, e hicieron especialmente responsables al comisario de turno Daniel Rojas y los oficiales Lucio Villalba y Joaquín Protasi, que se encontraban de servicio ese día de octubre.

Fuentes: Puerta E, Multisectorial contra la Represión Policial en Bariloche, Coordinadora Antirrepresiva por los Derechos Humanos Córdoba.

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A un año de la masacre de Bariloche
Por reenvío red eco alternativo - Monday, Nov. 24, 2014 at 9:39 AM

“Ya hace un año de los terribles días en que se instaló el terrorismo de estado en nuestra ciudad. Hace un año que en unas diez horas, tres balazos terminaron con la vida de tres de nuestros muchachos. Diego Bonefoi tenía 15 años y lo mató un balazo de la policía de Río Negro hace un año. Nicolás Carrasco tenía 16 y lo mató un balazo de la policía de Río Negro hace un año. Sergio Cárdenas tenía 29 y lo mató un balazo de la policía de Río Negro hace un año”, así comienza el comunicado difundido por la Multisectorial contra la Represión y la Impunidad.
A un año de la masacre de Bariloche continúa el reclamo de justicia para Diego Bonnefoi, Nicolás Carrasco y Sergio Cárdenas, cárcel efectiva a los asesinos, desmantelamiento de la BORA, renuncia del ministro de Gobierno Diego Larreguy, renuncia del jefe de la policía provincial Cufré y juicio político al gobernador Miguel Saiz.
A continuación el comunicado completo de la Multisectorial: “Se va a cumplir un año. Ya hace un año de los terribles días en que se instaló el terrorismo de estado en nuestra ciudad. Hace un año que en unas diez horas, tres balazos terminaron con la vida de tres de nuestros muchachos. Diego Bonefoi tenía 15 años y lo mató un balazo de la policía de Río Negro hace un año. Nicolás Carrasco tenía 16 y lo mató un balazo de la policía de Río Negro hace un año. Sergio Cárdenas tenía 29 y lo mató un balazo de la policía de Río Negro hace un año.
Hace un año que reclamamos justicia por estos crímenes. El policía Colombil, asesino de Diego, fue condenado a 20 años de prisión, esto lo dictaminó la justicia, pero hace un año que estamos esperando y exigiendo que la fuerza policial de la cuál formó parte Colombil explique cómo uno de sus efectivos puede matar por la espalda, en la madrugada, a un chico de 15 años.
Las causas por las muertes de Sergio y de Nino, están siguiendo un derrotero increíble. Se desestimó el accionar del juez al que le corresponde la causa, lográndose que los imputados por el mismo, hasta ahora, no hayan declarado. Se está eludiendo implacablemente que paguen su culpa tanto los autores materiales como los intelectuales de estas muertes.
Por los abusos y torturas del día 18, todavía no hay efectivos detenidos. Los días 17 y 18 de junio de 2010 en nuestra ciudad reinó la inseguridad, la provocación, el terror instalado desde el propio estado rionegrino contra un sector de la población civil.
Desde esos días, ni uno solo hemos dejado de reclamar justicia, a pesar de saber que todos los meses nos esperan, al finalizar la marcha, los mismos efectivos que actuaron durante la represión y sabiendo que es muy posible que entre ellos se encuentren los asesinos de Sergio y de Nino y los torturadores de los jóvenes detenidos el 18. No hemos dejado ni vamos a dejar de estar en la calle, en la justicia, en los medios, en los estamentos que representan a los gobiernos municipales, provinciales y nacionales, exigiendo justicia, que es lo que el poder les debe a los familiares de las víctimas de esas sangrientas jornadas.
Como todos los meses, este 17 marchamos exigiendo justicia. Nos concentramos a las 14 horas en la plaza del Barrio 169 viviendas, plaza en la que fue asesinado Diego. En ese lugar prenderemos velas para acompañar a los familiares que tendrán las palabras de ministros de distintas iglesias. Desde ahí marcharemos hacia el Centro Cívico”.

Adhesiones: multisectorial2010@gmail.com

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