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"Para pedir el permiso de la Pachamama necesitamos la hoja de coca"
Por Agassaganup O Zobá -
Thursday, Mar. 12, 2015 at 11:46 PM
agassaganup@gmail.com
El jueves 12 de marzo se llevó a cabo en Parque Avellaneda, en el barrio de Floresta, el día del “Acullico”, donde se propone revalorizar la hoja de coca, símbolo de la cosmovisión andina. Esta actividad, se realizó casi en simultáneo con la llevada a cabo en el hermano país de Bolvia, donde hombres y mujeres se manifestaron por el derecho y respeto a ese modo de vida, centrado en esa actividad. Alex Cuellar, docente aymara, impulsor y organizador de esta jornada, remarcó en Agassaganup la necesidad de poner en primer plano la protección de la hoja, combatiendo las miradas negativas que aún hoy se encuentran sobre ella. “Desde la penalización directamente se la asocia con el narcotráfico, entonces no se está valorando lo que se usa para la salud, la alimentación, la soberanía alimentaria. Se pone el valor en otros, por ejemplo la soja, que está muy valorada”. “Esto de poder encontrarse con uno y estar con la Pacha, nos (lo) posibilita la hoja de coca, reflexionar, dialogar, estar en armonía con el otro también”.
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Reproductor Flash: Para insertar este reproductor en otros sitios: seleccionar, copiar y pegar este codigo:La necesidad de llevar a cabo el encuentro, según Alex “es empezar un poco a valorizar nuestros usos y costumbres como pueblos originarios, creo que desde tiempos inmemoriales esto de lo que es el acullico se ha venido practicando, y en este tiempo se llega a penalizar esta práctica. Tenemos que valorar las acciones de nuestro gobierno hermano de Evo Morales Ayma que en Bolivia ha despenalizado lo que es el acullico. Pero lo que se pretende es que también sea reconocido en otros países, que tenga libertad, porque la hoja de coca es un símbolo que trasciende el imaginario de estos tiempos”.
“Desde lo que es la penalización se la asocia directamente con el narcotráfico, entonces no se está valorando lo otro, lo que se usa para la salud, la alimentación, la soberanía alimentaria. Se pone el valor en otros, por ejemplo la soja, que está muy valorada y de repente (la hoja de coca) tiene muchas más proteínas. Entonces este planteo del acullico también estaría relacionado con esto que es la soberanía alimentaria”, manifestó el docente aymara.
Alex continuó honrando no solo su raíz aymara, sino también querandí, nación muchas veces olvidada en los relatos y en la historia: “Nosotros como andinos, y residentes en esta tierra de los Querandíes, tenemos un espacio llamado la Waka, que es un lugar que se viene construyendo, que nos permite reflexionar todos estos recorridos, en aymara lo llamaríamos el Thakhi, que queremos decir el camino, el recorrido de la vida que ancestralmente se viene. La Waka nos permite reflexionar, encontrarnos, porque es cierto: siempre han atacado los lugares sagrados de los pueblos originarios, las wakas. Hoy en estos espacios solo están las construcciones de las iglesias, pero no se han dado cuenta de que la gente igual ha ido para refrescar o tener vigente esa cosmovisión”.
“En Parque Avellenda tenemos esta construcción para justamente hacer memoria, para estar en contacto con la Pachamama, pero para eso necesitamos la hoja de coca, porque el pijcheo (masticado de coca), esto de poder encontrarse con uno y estar con la Pacha, nos (lo) posibilita la hoja de coca, reflexionar, dialogar, estar en armonía o en sintonía con el otro también. Entonces, todas esas cosas hacen falta, como acá el mate, ¿no? También tiene esto que es de los pueblos”, agregó Cuellar.
Al preguntarle sobre el cronograma de la actividad del 12 de marzo, Alex contó: “En principio estaremos pidiendo permiso a la Pachamama, y necesitamos la hoja de coca, es uno de los vehículos, entonces una vez llevado el permiso, estaremos con esto de lo que es el pijcheo, haciendo memoria, conversando y veremos hasta dónde alcanza nuestra memoria, esta posibilidad de reflexionar para estar en contacto con la naturaleza, con lo que es la Pacha”.
“Yo creo que estamos muy desencontrados, a pesar de que tenemos tantos medios posibles de comunicarnos, pero cada vez físicamente más alejados. Entonces el espacio de la Waka nos permite encontrarnos, tocarnos, mirar, observarnos, y bueno, para eso estaremos haciendo un Acullico, que será un apthapi, donde todos los que quieran participar o tienen ganas de participar, tienen posibilidad de traer un poco de hojas de coca y los que no tienen, como es apthapi, tendremos para compartir”. Así se despidió Alex, invitándonos no solo al evento, sino a un trabajo en conjunto mediante un permanente contacto.
Fuente: Cátedra Abierta Intercultural
Por Agassaganup O Zobá -
Thursday, Mar. 12, 2015 at 11:46 PM
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