Es un milagro inexplicable el que Donald Trump se haya salvado por milímetros en el atentado en Butler (Pensilvania) el pasado 13 de julio. Definitivamente Dios vota por este megacapitalista que será entronizado nuevamente como emperador del universo.
“Truhan, mentiroso, hipócrita, narcisista” así califican al magnate muchos de sus detractores mientras él se sonríe socarrón. Especialista en corrupción, fraude, chantajes, sobornos, estafas, adulterios, drogas, violaciones, prevaricación, espionaje, escuchas telefónicas, compra de jueces o compra de votos. Y como si no bastara un golpista en toda regla. Y lo peor de todo no hay poder humano ni divino que lo juzgue.
En el 2023 Trump fue acusado de 34 delitos graves de fraude derivados de los pagos en secretos realizados a la actriz porno Stormy Daniels. Trump. También fue declarado responsable de abuso sexual y difamación contra la periodista Elizabeth Jean Carrol. En su defensa los abogados adujeron que todo esto hace parte de un “complot político”. Se ha comprobado fidedignamente que Trump asistió a las fiestas del financiero violador y pedófilo Jeffrey Epstein en Little St.James (“la isla de las orgías”) epicentro de la red de tráfico sexual donde se cometían todo tipo de perversiones (incluso con menores de edad) En todo caso a Donald Trump lo cobija la impunidad y la inmunidad “Si fuera pobre ya estaría en la cárcel, pero como es un ricachón ¡arriba Trump!”
Fichado en el estado de Georgia con el numero PO1135809 por intentar alterar los resultados electorales del 2020. Trump posa desafiante en la fotografía policial (la más famosa en la historia de EE.UU junto a la de Al Capone) tomada en la cárcel del condado de Fulton (Atlanta) tras entregarse a las autoridades para responder por el intento de conspiración y revertir su derrota en las elecciones de 2020. Enfrenta 13 delitos graves incluidos el crimen organizado (asociación de tipo mafioso). Pero dejó una propina de 200.000 dólares y quedó en libertad con cargos. De inmediato partió a su mansión de Mar-a-Lago (the second White House) a jugar golf con sus compinches.
A pesar de los 34 cargos criminales por los que ha sido condenado en New York y las tres causas penales que aún tiene pendientes en otros tres estados del país sigue sacando pecho e insolente repite en voz alta: “Im Innocent”. No importa ni los dos juicios políticos que ya enfrentó ni las causas civiles con las que todavía tiene que lidiar ni las sentencias por abuso sexual y difamación por las que debe pagar una multa de 88 millones de dólares a E. Jean Carroll. Los juzgados han puesto a Donald Trump en una situación financiera delicada pues debe pagar unas multas que ascienden a 500 millones se dólares. En cualquier lugar del mundo este sujeto ya estaría tras las rejas pero en Estados Unidos gracias a sus influencias y fortuna es un ídolo de masas. En NY el día 10 de enero el juez Merchán declara culpable a Trump por los pagos a una actriz porno para mantener su silencio y así se convierte en el primer presidente convicto de la historia de EE.UU. -algo que antes de avergonzarlo, lo honra.
El padre fundador Madison sentenció: “la democracia es el mejor sistema político”. Como reza en la Quinta Enmienda: la propiedad privada, el derecho a la vida y la libertad es la base de la Constitución americana. Donald Trump a la cabeza del partido del “sentido común” ha obtenido en estas elecciones la cantidad de 77.303.573 millones de votos, (se alzó también con el voto popular) y esos votos son los que lo purifican y lavan todos sus pecados.
Atención que las estadísticas no mienten: el 70% de los protestantes y las sectas evangélicas de todas las denominaciones y cristianos o católicos (en un 30%) votaron por Trump (que es un presbiteriano) las mujeres blancas en 45% votaron mayoritariamente por Trump, los blancos votaron en 80% por Trump -entre los que hay que incluir proletarios, los obreros, el 45% del electorado latino votó por Donald Trump -porque en esencia son conservadores católicos guadalupanos contrarios a la cultura woke que promueven los Demócratas- los afros en un 14%, los asiáticos con un 38% le otorgaron el voto de confianza. Su favoritismo entre los jóvenes, latinos y no universitarios negros fue apabullante. Datos que contribuyeron a un aumento extraordinario de sufragios por parte de las minorías étnicas. A pesar de que los Demócratas contaban a su favor con el apoyo irrestricto los mass media, Internet, Silicon Valley, la prensa internacional y Hollywood. Pero lamentablemente en la legislatura abandonaron la clase trabajadora y los sindicatos.
Donald Trump construye su poder electoral en base a la clase trabajadora y la clase media desamparada (para pertenecer a ésta es necesario ganar entre 42.000 y 150.000 dólares anuales) Los migrantes nacionalizados americanos votaron a ojos cerrados por Trump. Ante el abandono de las zonas rurales los campesinos despreciados por las élites urbanas no les quedó otra alternativa que ayudar a Trump (63 % de votos) a reconquistar la presidencia de EE.UU.
Donald Trump es el sheriff bravucón que desenfunda los pistolones y viene a poner orden en el condado. Aunque sea un estafador, un defraudador de impuestos, un acosador, un abusador de mujeres, aunque explote a sus empleados y obreros, él encarna ese espíritu de superación que es el ejemplo a seguir por todo aquel que quiera hacer realidad el sueño americano. Dios lo ha elegido y los pastores más reaccionarios están unidos en cadena de oración para que se cumplan las profecías de las Escrituras. Los esclavos del capitalismo aman al patrón del mal y no les importaría ser crucificados en su nombre. Son capaces de votarle aunque se convierta en un asesino en serie. Tal y como él se jacta ante los reporteros: “Podría pararme en mitad de la Quinta Avenida y disparar a la gente y aun así no perdería votos”
Trump es implacable con las razas inferiores: mexicanos, chicanos, hispanos, latinos, indios malolientes, árabes “terroristas”, asiáticos pandémicos, o cualquiera que se atrevan a poner en tela de juicio la supremacía anglo-aria-caucásica WASP. Hay que preservar la pureza racial de unos seres altos rubios de ojos azules, efebos de sinigual belleza que han conquistado y sometido los cinco continentes. “Es intolerable que Kamala Harris, esa mulata hija de migrantes de Jamaica y la India venga a ensuciar la Casa Blanca” Es necesario el regreso del patriarca, del macho alfa, un superhombre fuerte en contra de la imagen maternal y payasesca de la candidata Demócrata. A Kamala Harris la patrocinaron con más de 1.500 millones de dólares el fondo Blackstone y George Soros y empresarios de Wall Street. Todo era optimismo en su campaña y en los debates esgrimiendo su eterna sonrisa atacaba a Donald Trump con una frase mágica: “orange man bad. Vote for me” (“el hombre naranja es malo”) “Sí, Trump es un fascista”; mientras él contestaba “Kamala es marxista y quiere establecer un gobierno comunista”. Definitivamente la polarización de la política estadounidense ha llegado a su clímax ; es una sociedad muy polarizada y no se sabe en qué momento se puede desatar una guerra civil: hombres contra mujeres, el negro contra el blanco, el hetero contra el homosexual, latinos contra los gringos, indígenas contra los WASP, los protestantes contra católicos, los pobres contra ricos, burguesía contra proletariado, etc…
El programa de Kamala fue lo más políticamente correcto pues priorizaba la inclusión, la sostenibilidad; ella es una defensora de los derechos civiles de los migrantes ilegales y partidaria de legalizarlos; una ideóloga del feminismo, de la progresía “woke” que quiere redefinir la naturaleza la propia del ser humano en nuevas identidades, promotora de las operaciones de conversión de sexo, del matrimonio homosexual, la eutanasia, el aborto, el transexualismo, el animalismo y el veganismo, se le acusa de querer cambiar la bandera de Stars and Stripes por el arco iris del LGBTIQ+, protectora de los derechos de los afroamericanos y del Black Leaves Matter. “Los Demócratas son comunistas ateos, anarquistas, laicos y progresistas. Kamala es una aliada de Ucrania y la OTAN en la guerra contra Rusia” “La delincuencia se instala en los Estados Demócratas” El duelo electoral se resume en: el uno (Donald Trump) por convertirse en el capo más poderoso de la tierra; y la otra por convertirse en la primera presidenta “negra” racializada (mulata hindú) de los EE.UU. Los “machos y las hembras WASP” no quieren a una mujer en la presidencia y menos mulata pues ya tuvieron suficiente con los Obama.
Mientras Donald Trump será el presidente de la “agenda 47”, o sea, él será el 47 presidente de los EE.UU, despreciando así la Agenda 2030 de las Naciones Unidas. Porque rechaza la política identitaria, la ideología de género que busca abolir la familia, la segmentación de personas por sexos y la oposición al aborto, las políticas de género, la defensa de las minorías raciales y los derechos de los inmigrantes.
Los Demócratas son más intervencionista y expansionistas como estaba escrito en el programa de Kamala: si ella llegaba a salir presidenta como comandante y jefa del ejército de EE.UU se comprometió a consolidar la fuerza de combate más fuerte y letal del mundo. Trump es un negacionista del cambio climático y el del efecto invernadero; se opone al decrecimiento, la deconstrucción y a la transición a energías limpias (eólica, hídrica o solar) más bien es partidario de incrementar las perforaciones petrolíferas, el fracking, la extracción de gas, el carbón o la energía nuclear. Es bien conocido su apoyo a la explotación de los combustibles fósiles porque EE.UU debe ser autosuficiente y dejar de depender de las importaciones de hidrocarburos. Su sueño es colocar a EE.UU como el primer productor mundial de petróleo.
“El ogro del Ku Klux Klan” está decidido a terminar el muro racista de separación que dejó a medio construir en la frontera entre EE.UU y México. Porque su prioridad para enfrentar la crisis migratoria y frenar la invasión de esos “forajidos, delincuentes, narcotraficantes, violadores que amenazan la nación más poderosa de la tierra” Entre los planes más significativos de Trump está el de expulsar entre 15 y 20 millones de migrantes ilegales (La denominada “Operación Aurora” de deportación masiva ya está en marcha) que costará 4 billones de dólares. Lo que no se ha calculado es la inmensa pérdida que va a sufrir la economía de EE.UU cuando expulse a los migrantes ilegales, elementos importantísimos en la producción agroindustrial, construcción, el sector servicios y mano de obra barata. Por eso sus amigotes multimillonarios le ruegan que no sea tan severo: “¿quién limpiará nuestras piscinas, quién cortará la hierba de nuestros campos de golf?” Muchos migrantes ya nacionalizados apoyan las deportaciones de sus hermanos porque son sus competidores y les quitan los puestos de trabajo.
“Los migrantes ilegales son como una plaga de langostas y pronto serán mayoritarios en EE.UU”. “Los latinos solo saben fabricar bebés” “Estamos frente a una guerra demográfica y hay que actuar antes de que EE.UU pierda su esencia” Los anglosajones herederos de los padres fundadores se sienten agredidos e intimidados ante la imparable invasión de inmigrantes clandestinos. Los millones de blancos supremacistas WASP desempleados y empobrecidos culpan de su infortunio a esa “escoria de latinos, afros, asiáticos o árabes” De acuerdo a las prospecciones de los demógrafos en el 2050 los WASP serán minoría.
Que se puede de esperar de este energúmeno que afirma que “EE.UU está en decadencia por culpa de los negros, de los latinos (la mejor reserva de trabajadores domésticos) los asiáticos o de los árabes. Se tiene que hacer una limpieza a fondo si se quiere iniciar un renacimiento”. Y eso es lo que ha venido aplicando desde su primer mandato y ya es la hora de finiquitar tan loable misión: recuperar el orgullo pisoteado por los Demócratas.
Según los resultados obtenidos en las elecciones del pasado 5 de noviembre la candidata Demócrata Kamala Harris, que se proyectaba como ganadora, ha recibido una monumental paliza que ni siquiera habían previsto las encuestadoras. Esto significa que a Donald Trump como nunca antes le han votado las minorías de afroamericanos, latinos, asiáticos y hasta árabes. Este es un inexplicable acto de masoquismo que tendrán que estudiar a profundidad los psicólogos y sociólogos. Desde luego que la creciente derechización de la sociedad es algo que nos deja perplejos porque los ciudadanos que tradicionalmente votan al Partido Demócrata ahora al parecer se han desengañado. Trump es el nuevo héroe de la clase media norteamericana, el as escondido debajo de la manga de la ultraderecha y la revancha contra los conspiradores Demócratas que le robaron las elecciones en el 2020.
El movimiento MAGA está compuesto en su mayoría por votantes blancos, anglosajones y protestantes de clase alta, nostálgicos del gran despertar “Wake up America”, la edad de oro de EE.UU a nivel político y económico. El American PAC recibió incontables donaciones de multimillonarios y oligarcas. Por ejemplo, el magnate tecnológico Elon Musk le “regaló” 220 millones de dólares a Donald Trump específicamente para convencer a los votantes indecisos en los estados clave en disputa. Una suma irrisoria porque mágicamente ganó 37.400 millones en cuatro días con Tesla.
Elon Musk, el potentado tecnolibertario propietario de TESLA, de SpaceX, y X, ha atraído a millones de votantes jóvenes que ven en él la máxima expresión del sueño americano. Es un genio superdotado comparable a Leonardo da Vinci- que dirigirá el Departamento de Eficiencia Gubernamental donde responsable de la ingente tarea de reducir el gasto público y eliminar la burocracia parasitaria (En EE.UU hay 3 millones de funcionarios, es decir, la cuarta parte ejecutiva (deep state). Pero el mecanismo más revolucionario quizás sea la utilización de inteligencia artificial en los campos de automatización, robotización y digitalización de todo el aparato estatal y las agencias federales. La sociedad del futuro será regida por el transhumanismo y la sumisión a la cibertecnología algorítmica. Matriz del autoritarismo fascista.
Se impone el pensamiento único. Prohibida la disidencia ¡cállate comunista! Son las consecuencias directas de la “batalla cultural” que redefinen las narrativas de nuestra época. Los más preclaros analistas nos advierten que si se cumplen todas las predicciones Elon Musk y Donald Trump sumirán a EE.UU. en el caos.
El padrino de la “cosa nostra” ha nombrado a familiares y amigos de confianza en cargos de vital importancia siguiendo el típico guion de una dictadura gansteril al mejor estilo de Vito Corleone y Al Capone. En este chiquero donde retozan las bestias, pisoteando la ética y la moral, esto es algo sucio, apestoso que revuelve las tripas. Jamás había caído tan bajo la clase política. Estamos ante la concentración de la riqueza en pocas manos; una dictadura de multimillonarios lunáticos y megalómanos entre los que cabe destacar un pequeño grupo de fascistas enloquecidos, oligarcas, terratenientes, grandes magnates, empresarios, banqueros, o inversionistas del globalismo financiero, mejor dicho, una élite de “iluminatis” devotos del becerro de oro. Estos “respetable patriotas” se dedican a la cultura de la ilegalidad, expertos en la evasión de impuestos y el manejo de cuentas ocultas en los paraísos fiscales. Y por supuesto que The Trump Organization, ese imperio inmobiliario de hoteles, resorts, campos de golf, casinos, urbanizaciones de lujo repartidos por medio mundo ahora multiplicará sus beneficios al ciento por ciento.
Donald Trump se propone liquidar el “deep state” o el “estado profundo” guarida de funcionarios ociosos y burócratas empedernidos. Y es que de los 8.560 mil millones de dólares del presupuesto destinado para el 2024 debe ser reducido a la mitad pues son los directos culpables de la ruina económica de los EE.UU. La deuda pública se eleva a la estratosférica suma de 31 trillones de dólares. Entramos en la vía del tecnolibertarismo que se rige bajo los nuevos postulados ideológicos del cibercapitalismo monopolista privatizador del siglo XXI. Que se puede esperar de una sociedad enloquecida víctima de la psicosis de masas que impulsa el consumismo desaforado del tecnocapitalismo fascista de una “inhumanidad automatizada” por el leviatán de la racionalidad y las operaciones algorítmicas. Críticos con los programas sociales pues crean una dependencia del estado benefactor que fomenta una sociedad viciosa y degenerada al borde del suicidio colectivo.
Por ejemplo, el “going direct” está moldeando el futuro a las monedas digitales y las finanzas con los bitcoins como reserva estratégica, y cuenta con el respaldo del BlackRock, patrón de los gestores de activos más grande del mundo (10 billones de dólares) -con un record de operaciones tras la victoria de Trump- una coyuntura que ha llevado también a Wall Street a máximos históricos y que para el próximo año prevé una bonanza sin precedentes. Las transnacionales americanas (instrumento neoliberal de dependencia) van igualmente a experimentar un crecimiento exponencial jamás visto. El mayor estímulo lo recibirá el complejo militar industrial y tecnológico aprovechando el boom de los conflictos bélicos que se desarrollan a nivel mundial. La fórmula es bien clara: “a más guerras, mayores ganancias financieras” Porque el objetivo de EE.UU es fragmentar el mundo para que ningún bloque emergente le haga sombra. Por los siglos de los siglos deben seguir siendo la superpotencia hegemónica mundial. Sea como sea el nivel de vida de los americanos debe mantenerse en alza a costa de la pobreza y la miseria del resto del planeta. Donald Trump obligará a que los europeos financien su propia defensa militar porque Washington aporta a la OTAN un multimillonario presupuesto que no compensa. Aislacionismo transaccional significa “qué estoy ganando yo por proteger un país que no es el mío” Tampoco se descarta que se retiren del ALCA, de la ONU.
Con sus 78 años Donald ya es un abuelo decrépito que debería estar en su mansión de Mar –a- Lago tomando el sol en la playa y jugando al golf con sus secuaces. Pero lo mueve su amor por EE.UU y esa pasión le hierve la sangre. Según los siquiatras es un paciente irrecuperable: sufre delirios de grandeza y el síndrome de narcisismo maligno. Es un energúmeno y psicológicamente desequilibrado e incoherente, tiene problemas cognitivos -causa de incapacidad si se aplica la vigésima quinta enmienda- Pero sus fanáticos reviran: “No es un loco, es un verdadero patriota”- Abrazado a la bandera de las barras y estrellas la besa como si se tratara de su mejor amante.
Encarna a la perfección su papel de “emperador del White Power”, el más grande charlatán, megalómano y ególatra admirador de Mussolini y de Hitler y que no se cansa de repetir que repartirá armas entre todos los ciudadanos de bien para que se defiendan de la amenaza terrorista (delincuentes de los guetos, migrantes ilegales, narcotraficantes y violadores) Estamos en un país que tiene mayor número de armas por habitantes en el mundo y donde la Asociación Nacional del Rifle es una de las instituciones más prestigiosas.
Trump se ha comprometido a reestructurar la seguridad ciudadana aumentando el número de Guardias Nacionales, Policías y militares, aparte del control total de la vida ciudadana por medio de cámaras de videovigilancia; detección y análisis biométrico para detectar a los peligrosos antisociales. Más seguridad significa también un sistema judicial más punitivo y disuasorio que aumenten las condenas a cadena perpetua o a la pena capital. Imperiosamente se necesitan más cárceles y correccionales para que “reine la paz entre los hombres de buena voluntad”
El máximo peligro para EE.UU (y la humanidad) -según Trump- son los musulmanes. “A todos esos fanáticos religiosos habría que expulsarlos en masa de los EE.UU pues no se sabe cuándo el alacrán te clava al aguijón”. ¡Irán me quiere matar! Tal y como se ha comprobado el pasado 8 de noviembre cuando un agente iraní -de origen afgano- llamado Farhad Shakeri había preparado un atentado por encargo de los ayatolas para vengar el asesinato de Soleimani. Y no solo eso sino que los terroristas islámicos están a punto de hacerse con bombas atómicas. “La yihad pronto no solo será musulmana sino también latina, y hasta negra pues esas razas se van a aliar con el propósito de destruir a EE.UU”. Es parte de su estrategia del miedo, del terror gracias a la cual ha recogido ese inmenso tsunami de votos.
Es muy común entre los guionistas de Hollywood para explotar el sentimentalismo crear un protagonista de las películas pobre, un latino o un negro. Pero ahora el argumento es totalmente inusual : se sublima al triunfador, el patrón capitalista, al multimillonario dueño de los más incalculables tesoros. “El nuevo George Washington” a pesar de su baja formación y casi nulo nivel cultural (es incapaz de situar en el mapa a ¡¡¡ Bolivia!!!!) con toda arrogancia sabe que la mejor defensa es el ataque. Así es como actúan los mafiosos de los bajos fondos. Se le acusa de abusador sexual y hasta de violar mujeres y él responde altanero sin inmutarse : “Ellas me aman. El culo, las tetas, la vaginas las ha hecho Dios para algo” “Las que me odian son las más cerdas, gordas y feas” El playboy organizador de concurso de belleza Miss Universo elegía las mejores candidatas para su harén. Es increíble pero las mujeres aman los tipos duros e irreverentes -incluso las mismas latinas “nanas sumisas” -según la terminología WASP- se rinden de rodillas ante el rey de reyes. Sin ningún escrúpulo por un buen puñado de dólares cualquiera le vende su alma al diablo. Algo que nos confirma el escaso nivel de conciencia política y compromiso social de nuestros connacionales. Nada que objetar pues pertenecen a una sociedad de consumo complemente “macdonalizada” ansiosa por devorar la basura que vomita la propaganda. Hay que anular cualquier respuesta desestabilizadora que amenace al sistema. Porque alienación es dominación.
La figura de Donald Trump ha absorbido por completo al Partido Republicano donde no hay nadie que le plante cara. El reconocido y confeso racista se ha autoproclamado el redentor de la América blanca WASP y contra viento y marea va a escribir una de las páginas más delirantes de la historia americana y universal. El muy soberbio no tiene ningún reparo en escupir a quemarropa improperios y groserías contra sus contrincantes para humillarlos y arrinconarlos contra las cuerdas. “a los opositores hay que judicializarlos y encarcelarlos porque son comunistas traidores a la patria” – ¿condenarlos a las hogueras del Ku Klux Klan? Los estadounidenses son muy morbosos y solo prestan atención a los espectáculos y la violencia.
En esta campaña lo único que ha interesado a los candidatos es aplicar estratagemas manipuladoras dirigidas por los genios del marketig político lanzando mensajes subliminales plagados de falsedades. La propaganda que se emitió a través de los medios de comunicación de masas: prensa, radio televisión o redes sociales- durante la campaña electoral se elevó a la astronómica suma de 1.35 mil millones de dólares (repartidos entre Google, Meta, Facebook, Youtube, TikTok) La misión de los millones de bots y trolls que operan en el ciberespacio no es otra que lobotomizar el cerebro de los votantes: ¡Forward, Forward Kamala!, ¡Together we rise!, ¡Trump is money, Trump is money, Trump is money! ¡Make America Great Again! ¡Save America Again! En EE.UU se desarrolló una campaña virtual donde los protagonistas con una alta carga de cinismo y amoral simulación se dedicaron a mentir y blasfemar. Este deslenguado hooligan de los Yankees de NY en el colmo del descaro el mismo día de la votación para sembrar el caos y la desconfianza denunció que existía un fraude en Pensilvania.
Por su personalidad extrovertida y desquiciada se ha ganado la antipatía de millones de progresistas pero también el respaldo de otros tantos millones de ultraderechistas. EE.UU necesitan un tipo fuerte y enérgico, es decir, un macho alfa que dé un puñetazo encima de la mesa y vocifere ¡basta! A la gente le gusta un tipo duro que imponga el orden y la ley. Es urgente la recuperación económica de la clase media que se ha ido a pique en estos últimos años. El costo de la vida es muy alto y los salarios pierden el poder adquisitivo. Una economía castigada por la alta inflación atenta contra el estado de bienestar. La crisis social no admite atajos ni soluciones temporales. La mayoría de los ciudadanos sobreviven gracias a los préstamos que piden a los bancos y cuyos intereses tendrán que pagar hasta después de muertos. En EE.UU todo el mundo está endeudado o hipotecado pues prefieren pagar a crédito con tal de hacer realidad todos sus caprichos. Se vive para trabajar según los preceptos del calvinismo y el puritanismo. Y a trabajar y trabajar a destajo horas extras incluidas porque de lo contrario es muy fácil caer en el agujero negro de la marginalidad. ¡dólares o muerte! De acuerdo con el sistema neoliberal competitivo para triunfar es necesario aplastar a los rivales más débiles. Pero ¿qué dirán esos 40 millones de miserables excluidos del gran banquete capitalista? El desempleo sigue siendo una de las principales preocupaciones de los ciudadanos aunque el Partido Demócrata afirme que ha creado más empleo que nunca. Pero hay que propagar el miedo, la incertidumbre y el caos: “pórtate bien porque tu podrías ser el próximo homeless que ocupe un sucio callejón en cualquier gueto pobre de los EE.UU.” Así es como funciona el perverso sistema capitalista que pisotea sin clemencia la dignidad humana.
Donald Trump no puede disimilar su proverbial racismo ya que él identifica a las personas de piel blanca como más guapos, inteligentes, agradables, más educados y de clase social más alta; mientras a las demás razas las considera inferiores por ser de piel oscura, incultas desagradables y pobres. Y ante la denuncia de un ciudadano en Springfield (Ohio) que perdió su mascota dijo en un debate: “los haitianos se comen a los perros, los inmigrantes se comen a los gatos” Con este tipo de acusaciones que exacerban el odio y la xenofobia en una supuesta sociedad americana multiétnica y multicultural.
La demostración más palpable de su santidad se produjo cuando durante un acto de campaña en Pensilvania Donald Trump sufrió un atentado que estuvo a punto de matarlo. Milagrosamente La bala disparada por un francotirador apenas le rozo su oreja ¡Es inmortal aleluya! Según él “Dios desvió la bala”. Esta es una señal divina de que es el elegido para salvar a EE.UU y al mundo. Los votantes evangélicos y los blancos cristianos ultranacionalistas creen que es el mesías “god made trump” en esta batalla espiritual entre el bien y el mal Donald encarna al rey David, Ciro el grande, como parte de un espectáculo tragicómico él es un “ángel glorioso” que viene a salvar el alma blanca. Porque como está escrito en la Biblia “necesitaré a alguien dispuesto a entrar en la guarida de las víboras, alguien fuerte y valiente que no tenga miedo ni se aterrorice de los lobos cuando ataquen” “save America please, Mr. Trump” la ultraderecha ultranacionalista ha entronizado a Trump junto al padre, al hijo y el espíritu santo.
Inmediatamente asuma el cargo va a declarar una guerra comercial contra China subiendo los aranceles hasta niveles nunca vistos. “el calentamiento global fue creado por y para los chinos con el fin de impedir que la producción de Estados Unidos no sea competitiva” Entramos en la deriva del ultranacionalismo económico proteccionista del “American First” que pretende bloquear de este modo las importaciones extranjeras y estimular la fabricación nacional y sus exportaciones con el fin de conseguir un balance comercial favorable. Se aplicará un plan de choque empezando por la reindustrialización, la bajada de impuestos y activar las políticas aislacionistas y proteccionistas. No se descarta cerrar la Reserva Federal y el Bank of America para cambiar la dinámica y la independencia de la política monetaria.
Trump es un admirador de la política de exterminio que aplicó su camarada Putin en Siria contra el Estado Islámico. También lo felicitó cuando invadió Ucrania diciendo que era “un golpe genial” No nos extrañaría para nada que, a pesar de las acusaciones de “criminal de guerra” emitidas por la CPI, se reúna con el presidente ruso en terreno neutral. Bueno al fin y al cabo entre mafiosos se guardan las espaldas. Putin admira a Donald por su audaz comportamiento durante el intento de asesinato en un acto de campaña en Pensilvania “es muy valiente y estoy dispuesto a hablar con él, e incluso reestablecer relaciones” ¿Podrá ser readmitido en el G8 y los foros internacionales? Sus vínculos con los oligarcas del Kremlin son bien conocidos y en la primera elección de Donald Trump los rusos intervinieron para que saliera ganador. En Rusia celebraron por todo lo alto el triunfo de Trump como un apoyo a la invasión de Ucrania. Medvédev escribió en su cuenta de Instagram: “odia gastar dinero en parásitos y vividores” “la escoria de Kiev será enterrada en polvo blanco”
Donald Trump promete acabar en 24 horas la guerra entre Ucrania y Rusia al suspender el apoyo económico y militar a Ucrania. Putin controla a Donald Trump porque él admira a los dictadores y autócratas.
El lobby judío está de plácemes pues su principal valedor vuelve a ocupar la Casa Blanca “Desataré el infierno en Gaza sino se liberan los rehenes israelitas antes del 20 de enero” No hay duda que « Israel first » y sin ninguna restricción se aumentará el envío de armas y municiones y dará carta blanca para que su íntimo amigo Netanyahu finiquite el genocidio palestino (y de paso anexionarse Cisjordania) “Hay que extirpar el cáncer del terrorismo yihadista de Hamas y de Hezbollah”. En Oriente Medio lo único que funciona es La política del caos, la muerte y la destrucción. Trump como apóstol de la paz impondrá la “Pax Americana”.
Hay que movilizar a la frontera sur a la Guardia Nacional y al ejército para atajar el problema de la migración, el combate al crimen organizado, los carteles del narcotráfico. La banda venezolana « el tren de Aragua » es un extraordinario desafío para la seguridad y la estabilidad de EE.UU. “es la hora de neutralizar la sacudida narcoterrorista”
La construcción del muro de Trump (monumento por el que será recordado eternamente) ya ha sido concedida a varias empresas especializadas como Lafarge-Holcim y General Dinamics y entre la que se incluye la israelí Magal Security Sistems con una vasta experiencia en los territorios ocupados en Palestina. Un muro paradójicamente construido por obreros inmigrantes de origen latinoamericano.
Donald Trump enfurecido amenaza con deportar de 10 a 15 millones de migrantes ilegales. Y le advirtió a la nueva presidenta de México Claudia Sheinbaum que si no frena la llegada de migrantes clandestinos le impondrá un arancel del 25% a todos los productos mexicanos. Además, está decidido a implementar un programa desnaturalización, es decir, cambiar las leyes para que los que los bebés que nacen en EE.UU no sean nacionales si sus padres son extranjeros. Su sagrada misión es terminar el muro del apartheid en la frontera con México para detener la invasión de inmigrantes, narcotraficantes y terroristas.
Trump en sus discursos saca a relucir las más denigrantes y cínicas blasfemias, un demoníaco coctel plagado de perversión y obscenidades como se comprobó durante un acto de campaña en New Hampshire: “los migrantes son portadores de malos genes que envenenan la sangre de EE.UU” – haciéndose eco de una expresión usada por Adolf Hitler. En un acto reprobable de desprecio el comediante Hichcliffe, íntimo amigo de Trump, y animador de sus mítines llamó a Puerto Rico “isla de basura en el océano” Aunque parezca mentira si pudieran un 26% de su población votaría por Trump.
De acuerdo a los dictados de la doctrina Monroe y el Destino Manifiesto hay que embridar a las “repúblicas bananeras” empezando por recuperar el canal de Panamá e invadir otra vez a México (que debería convertirse en estado de la Unión Americana pues recibe subsidios que rondan los 400 mil millones de dólares) En su demencial política expansionista también se incluye anexionarse Canadá y Groenlandia. “México está realmente en muchos problemas, muchos problemas, es un lugar muy peligroso y está dirigido por carteles y no podemos permitir que esto suceda. La violencia de las bandas de narcotraficantes es insoportable. México es un productor de fentanilo que destruye a la sociedad americana y su gobierno tiene que impedir que millones de personas ingresen en nuestro país. “Pueden detenerlos y vamos a imponer aranceles muy severos a México y Canadá que también es una entrada fácil de las rutas de migrantes ilegales. Las drogas que llegan a través de esas fronteras están marcando una cifra record” –
La internacional ultraderechista adora y venera a Trump como el líder indiscutible de la contrarrevolución conservadora y neoliberal. La ecuación es muy simple: a más Trumpismo, más imperialismo y más militarismo económico. Porque con sangre se escribe la historia de la humanidad. EE.UU es un avaro prestamista, saqueador y extractivista que somete con la deuda externa dirigidas por el FMI y Banco Mundial a los países del Tercer Mundo. Es la mejor táctica (el terrorismo financiero) para imponer sanciones, boicotear y bloquear países y tumbar gobiernos hostiles como es el caso de Cuba, Venezuela y Nicaragua. El imperialismo en todo su esplendor con 254 bases e instalaciones militares repartidas por todo el planeta.
Carlos de Urabá 2025