Mario Firmenich, junto a su cuñado, el también ex dirigente montonero Martínez Agüero.

Mario Fiore mfiore@lsoandes.com.ar

Mario Firmenich, el ex líder del movimiento Montoneros, pasó ayer por Mendoza para presentar un libro de su autoría en el que propone un nuevo sistema político para las sociedades latinoamericanas. “Soy un excluido del poder político. El Partido Justicialista siempre perdió mis fichas de afiliación. Ahora no tengo interés en pertenecer a la clase política que me excluyó”, confesó Firmenich a un auditorio que se congregó para escuchar su tesis político-económica que le valió doctorarse en economía en una universidad española.

Firmenich evitó ayer en Mendoza protagonizar incidentes. Es que el lunes, en Córdoba, terminó insultando a un periodista y retándolo a duelo luego de que éste le preguntara por su doble rol durante los años ’70 como líder montonero y cómplice del poder militar (como sostienen algunos ensayos políticos recientes).

Firmenich se abocó, en cambio, a explicar su teoría sobre la economía, que tiene como hipótesis central que no existe un sistema económico que pueda prescindir de las decisiones que toma el poder político. “La hiperinflación es lo que produce el mercado cuando no hay ninguna regulación”, explicó.

El libro de Firmenich se llama “Eutopía. Una alternativa al modelo neoliberal” y fue escrito en 1999, cuando el ex guerrillero terminó su tesis de doctorado en Barcelona.

Esta visita de Firmenich al país, luego de nueve años de ausencia, está ligada al impulso que le dio el mendocino Guillermo “Polo” Martínez Agüero, referente de Montoneros en la provincia. Ayer, Martínez Agüero y el periodista Julio Rutman acompañaron a Firmenich en su disertación en el Centro Cultural de las Artes.

“Nunca me movió la utopía sino la idea de cambio posible. Por eso el título de mi libro es un juego de palabras y significa que, agotado el paradigma neoliberal, hay que hacer aportes para un nuevo modelo sustentable políticamente”, dijo Firmenich.

Según el ex dirigente político, es posible desde América Latina conseguir una globalización justa y sustentable. “Existe una necesidad de integración continental que necesita de medidas concretas”, apuntó.

Excluido

Luego de autodefinirse como un excluido por la actual “clase política”, Firmenich dijo que Néstor Kirchner debería convocar a un proceso de debate para construir consensos sobre políticas a largo plazo.

“Estoy dispuesto a volver a la Argentina”, dijo y explicó que su larga ausencia se debe a que en 1996, en pleno menemismo, decidió irse del país a perfeccionarse en el exterior.

El panel de periodista que acompañaron ayer la presentación del libro de Firmenich (Mónica Borré, Andrés Gabrielli y Miriam Núñez) le preguntó qué es lo que lo diferenciaba de otros asesores presidenciales que, como él, participaron de la lucha armada en los ’70.

“Pregúntenle a Kunkel o a Bielsa por qué no formo parte del entorno de Kirchner”, dijo. Y agregó: “No creo que a Verbitsky o a Bonasso les interese compartir el poder que tienen conmigo. Es que yo no soy dócil. Exijo respeto. Y no cumplo órdenes”, agregó.

Sin embargo, cifró en la teoría de “los dos demonios” que a su parecer sostiene el establishment la causa de su exclusión política. “Y una clase cuando está en el poder quiere conservarlo”, añadió.