El fiscal a cargo de la investigación del crimen, Alejandro Pellegrinelli, había pedido el sobreseimiento y fue apoyado por la fiscalía general. La familia de Brandon Romero, la víctima, se constituyó como querellante y logró la elevación de la causa a juicio. El subteniente Arcángel Bogado quedó imputado por el homicidio agravado del joven y deberá enfrentar a la justicia.
Esta semana se confirmó la imputación del Subteniente Pedro Arcángel Bogado por Homicidio agravado por haberse cometido abusando de su función o cargo por ser miembro integrante de las fuerzas policiales y por el empleo de arma de fuego. Bogado disparó siete veces contra Brandon Romero, de 18 años, y luego se excusó diciendo que habían intentado robarle su moto. El juez Saúl Errandonea rechazó el sobreseimiento que planteó la defensa y también el cambio de calificación legal a “exceso en la legítima defensa” y elevó la causa por la muerte de Brandon Romero a juicio.
En su escrito el magistrado señala algunas falencias en la investigación del caso. Por ejemplo, que no se haya tomado declaración a algunos de los jóvenes que acompañaban a Brandon la noche de su muerte; o que no aporte elementos que confirmen que quien viajaba en la moto con Brandon estuviera armado, ni vestigios de que haya disparado contra Bogado. Errandonea observa que lo que sí parece confirmarse es que Romero se encontraba desarmado: “no encuentro justificación alguna a semejante ataque agotando la provisión de su cargador sobre una persona desarmada”. También señala el carácter de funcionario del imputado, que revista como Subteniente de la Policía de la Provincia de Buenos Aires.
“Estoy feliz, pero de a un paso a la vez”, dice Romina Vergara, la mamá de Brandon. “Creo que salir a la calle y pedir justicia sirve para que no quede impune el asesinato de Brandon, y a la vez es cansador, me queda un gran camino todavía”, agrega. Queda esperar el juicio y atravesar ese proceso, que no es poco.
Con la elevación a juicio queda abierta la posibilidad, a requerimiento de Cesar Sivo como representante de los particulares damnificados, de pedir una ampliación de la imputación y por la tentativa de homicidio que también representó el accionar de Bogado al dispararle al joven que iba en la moto junto a Brandon y recibió un disparo en el hombro.
La Secretaría de Derechos Humanos de la Nación se presentó ante el tribunal en carácter de Amicus Curiae y aseguró que de haberse dictado el sobreseimiento de Bogado “dejaría un caso de posible violencia institucional en la más absoluta impunidad, sin garantizar el debido acceso a la jurisdicción de la familia de la víctima, lo que podría derivar en responsabilidad internacional para el Estado argentino”.