Las democracias occidentales han mutado en propagandistas de la guerra y el conflicto
La profecía de Marshall McLuhan de que "el sucesor de la política será la propaganda" se ha cumplido. La propaganda en bruto es ahora la norma en las democracias occidentales, especialmente en Estados Unidos y Gran Bretaña.
Por John Pilger.
En cuestiones de guerra y paz, el engaño ministerial se presenta como noticia. Se censuran los hechos incómodos, se alimentan los demonios. El modelo es la propaganda corporativa, la moneda de la época. En 1964, McLuhan declaró célebremente: "El medio es el mensaje". Ahora la mentira es el mensaje.
¿Pero es esto nuevo? Hace más de un siglo que Edward Bernays, el padre de la manipulación empresarial, inventó las "relaciones públicas" como fachada para la propaganda de guerra. Lo que es nuevo es la eliminación virtual de la disidencia...