Trabajadores de la Algodonera Avellaneda iniciaron esta mañana el tercer día consecutivo de manifestación ante la sede de la planta aceitera de Vicentin Avellaneda, provincia de Santa Fe, sumando además una segunda protesta frente a la planta de Buyanor Avellaneda, también del Grupo Vicentin.
La protesta en las plantas de Buyanor y Vicentin Avellaneda. Fotos: corresponsales populares.
Continúan reclamando que la empresa se comprometa a comparecer y abrir una negociación real en una nueva audiencia en Ministerio de Trabajo de la Provincia de Santa Fe para resolver el conflicto. Los trabajadores se encuentran sosteniendo una larga huelga de más de 70 días reclamando aumento salarial.
“Un conflicto de trabajadores que se están muriendo de hambre”
Pocos días atrás, Daniel Yofra, el Secretario General de la Federación nacional de obreros aceiteros y desmotadores de algodón, habló sobre el conflicto de la Algodonera Avellaneda: “En Vicentín no entienden por qué le siguen haciendo un paro. Hace 4 meses que están de paro por sueldos de hambre”. Lo hizo en declaraciones al portal sindical InfoGremiales.
“Estamos en una situación bastante conflictiva, que nosotros la agarramos hace un mes en solidaridad con esos compañeros porque el propio sindicato (la Asociación Obrera Textil) los abandonó. No solamente los abandonó, les dio la espalda cuando quisieron hacer huelga para salir del estado de pobreza”, recordó.
En su momento, los delegados de la Algodonera Avellaneda denunciaron que el sindicato textil era aliado de la empresa Vicentin, por lo que se afiliaron al Sindicato de Aceiteros y Desmotadores de Reconquista, parte de la Federación nacional.
“Si tuviéramos políticas obreras en este país posiblemente ya se hubiese resuelto”, disparó el dirigente. “Queremos visibilizar el conflicto para que se sepa que no es un problema de encuadre sindical, ni encuadre convencional. Lo que estamos diciendo es que hay un grupo mayoritario de esos compañeros que se afiliaron al gremio nuestro y nosotros los estamos representando. Lo importante es que salgan de esos salarios miserables de 20 mil, 30 mil pesos que cobran”.